Por prácticamente toda la Prensa me he enterado de que el Tribunal Constitucional ha avalado finalmente la petición del Partido Popular por seis votos (los magistrados del sector conservador) frente a cinco (los progresistas) y ha suspendido este lunes la tramitación de la reforma exprés del Código Penal en la que el Gobierno había incluido sendas enmiendas para poder renovar el tribunal de garantías.
Asimismo esta situación ha dado lugar a declaraciones de cientos de periodistas y políticos que yo he también avalado, desmintiendo la declaraciones que siguen a continuación : Pedro Sánchez, en una comparecencia sin preguntas y sin prensa en La Moncloa este mediodía, no ha querido rebajar la gravedad del choque entre el Gobierno y el Tribunal Constitucional —“El Gobierno adoptará cuantas medidas sean necesarias para poner fin al bloqueo del Constitucional y del Poder Judicial”, ha dicho—, si bien ha garantizado que desde el Ejecutivo “aunque no compartamos la decisión, acatamos la resolución adoptada por la mayoría conservadora del Tribunal”.
El presidente ha insistido en que la decisión de paralizar la reforma legal del Gobierno es inédita en España y en Europa. En la misma declaración institucional ha cargado contra el Partido Popular: “Esta decisión tiene su origen en que el PP, cuando perdió las elecciones, decidió no cumplir la Constitución y bloquear primero el Consejo General del Poder Judicial y ahora el Constitucional, con el único objetivo de mantener una composición más favorable a sus intereses”, ha concluido desde La Moncloa.
Naturalmente todo lo dicho por Pedro Sánchez es una falsedad, dado que cuando en su momento se le votó, afirmaba lo contrario de lo que ahora proclama, me refiero específicamente a los temas objeto de una riada de decretos leyes con las que pretende reducir la malversación, dejar campar a los independentistas permitiéndoles la posibilidad de referéndums y acercando los presos etarras al país vasco, quitar la sedición del código penal , asociarse nada menos que con Bildu heredera de la ETA criminal, permitir la canallada de las leyes de genero que han dado como resultado el ahorro de las penas de pederastas y mal tratadores, consiguiendo lo contrario de lo que teóricamente se pretendía y probando de conseguir el enfrentamiento de los magistrados tanto del Tribunal Constitucional como del Consejo General del poder judicial, con los diputados del poder legislativo, lógicamente los de izquierdas e independentistas llevando el insulto a la sede del Parlamento, y falseando la representación de la democracia y de la libertad ciudadana, llamándole el” asalto de las togas”, cuando el equilibrio de los poderes ejecutivo legislativo y judicial, se consiguen gracias a las leyes que compensan los distintos poderes del Estado, facilitando la libertad.
Para ello se ha elaborado un manifiesto que suscribo y que dice esencialmente : Asistimos con preocupación a la deriva autoritaria de un gobierno que está llevando a cabo un asalto frontal del Tribunal Constitucional y del órgano de gobierno del Poder Judicial, con el único fin de poder llevar a término su tarea de derribo del marco constitucional.
EXIGIMOS a todos los empleados públicos que cumplan con su deber de defender el marco constitucional de convivencia. INSTAMOS a los partidos de oposición a que utilicen todos los mecanismos constitucionales a su alcance para cortar, o al menos dificultar lo más posible, la deriva autoritaria y antidemocrática del actual gobierno.
ANIMAMOS a las organizaciones de la sociedad civil a convocar cuantos actos y protestas sean necesarios para hacer llegar al gobierno, y a toda la sociedad, la voz de los ciudadanos comprometidos con la defensa de la democracia y el estado de derecho. RECORDAMOS la responsabilidad de los medios de comunicación, sus profesionales y colaboradores en la defensa de la democracia y la libertad consagradas en la Constitución Española.
PEDIMOS a todos los ciudadanos que respalden de manera activa todas las acciones y movilizaciones que los partidos de la oposición y las organizaciones de la sociedad civil puedan poner en marcha, y que cada uno defienda los valores constitucionales en todos los ámbitos sin esperar a que los demás lo hagan. Las democracias no mueren cuando sus enemigos tratan de destruirlas.
La democracia muere cuando los que tenemos la obligación de defenderla no cumplimos con nuestro deber de hacerlo.
Es absolutamente preciso recordar a Pedro Sánchez los compromisos que adquirió cuando le votaron y que ahora se vuelve del revés con tal de seguir en la Moncloa, gracias a los votos de los partidos radicales de izquierda, que conforman el Gobierno llamado Frankenstein, vendiendo por parcelas la gobernabilidad del Estado con tal de que le voten sus presupuestos y pueda así seguir como presidente creando un caos del que pretende beneficiarse en tanto se van acercando las elecciones, pero los españoles no somos tontos y nos damos cuenta de que se vende nuestro país por cuatro monedas, gastando ingentes masas de millones de euros para conseguir sus objetivos personales.
Ciertamente según Ctxt la excusa la ha proporcionado el Gobierno, que ha hecho gala de una inexplicable torpeza parlamentaria. Tras idear una manera legítima y constitucional de forzar la inmediata renovación de un Tribunal Constitucional que empieza a acumular meses de retraso, se presentó en el Parlamento por la vía equivocada.
En su afán por acelerar al máximo el proceso, esa reforma del sistema de renovación no se tramitó como una proposición de ley autónoma, sino como una enmienda a la reforma de la sedición y la malversación en el Código Penal que tanto dio que hablar hace unos días y que es precisamente lo que ha motivado la defensa por el Tribunal Constitucional de nuestra Constitución de 1978. Ahora se ve obligado a acatar Pedro Sánchez la resolución, que no tiene vuelta de hoja.
Si (
No(
