www.diariocritico.com

Un Gobierno bífido

Por Gabriel Elorriaga F.
x
elorriagafernandezhotmailcom/18/18/26
martes 14 de marzo de 2023, 11:30h

España no padece un Gobierno de coalición, como pretenden quienes forman parte del engendro, sino un Gobierno bífido, del que no existe otro ejemplo en el mundo. No hay nada parecido al Gobierno sobre el que flota Pedro Sánchez, quien ha sido incapaz de amasar, en estos años, una programación convenida entre los diversos elementos que no ha sabido convertir en un equipo. Dos populismos exacerbados, uno socialista y el otro comunista, comparten mesa con las desavenencias públicas y acusaciones cruzadas pero sin ruptura formal del acuerdo de subsistencia. Existen gobiernos de coalición en otros países. Pero en ninguno serían aceptables para una gobernabilidad efectiva las tensiones de esta tropa de incompetentes y sectarios jugando a la vez a poder y oposición dentro de casa. Una nación de la dimensión demográfica, económica y estratégica de España vive la singular experiencia de un presidente que no vota en el Congreso la toma en consideración de una reforma legal para rectificar la Ley que él mismo remitió y votó hace semanas y ahora hace que se modifique sin votarla ni pedir la menor disculpa por el despropósito, mientras los delincuentes sexuales continúan beneficiándose del desconcierto. Por contraste, la inefable Yolanda Díaz si fue a votar pero contra la iniciativa del Gobierno del que es vicepresidenta. El presidente ausente estaba cumpliendo la agenda de fotografiarse con unas ancianitas preocupadas por sus pensiones. Es decir, en campaña electoral audiovisual que es lo que importa, mientras se consume el Gobierno bífido en sus contradicciones sobre dichas pensiones.

El tradicional encono que caracteriza a la izquierda, que fue capaz de acabar la Guerra Civil a tiros entre socialistas y comunistas, asoma su oreja en la tensión que mantienen Pedro Sánchez y Pablo Iglesias quien, desde su destierro manipula a sus representantes dentro del Gobierno bífido para mantener abierta la bifurcación. Es evidente que las elecciones autonómicas y municipales están demasiado cerca para pedirle peras al olmo. Pero si hasta aquí se ha llegado y no se puede gobernar con un programa común ¿Por qué no se convocan elecciones generales junto a las municipales para evaluar el respaldo popular cierto que obtengan los partidos en juego y se llega a una solidez gubernamental, sea del signo que sea? ¿Hay que esperar a que huyan los inversores y los emprendedores para que cuarenta y cinco millones de españoles empobrecidos queden al capricho de un autoritario sin autoridad dentro de su propia casa?

Ya nada va a poder realizarse seriamente en estas semanas preelectorales pero ¿Y después? El largo y cálido verano y Pedro Sánchez aferrado a la ilusión de que la presidencia de turno de la Unión Europea le va a dar pedestal para superar su descrédito a base de una abrumadora presencia televisiva gracias a las atenciones internacionales que recibirá y que no son por su falta de criterio sino porque son atenciones debidas a España y no a su presencia como presidente de un Gobierno trufado de comunistas. Este protagonismo formal quizá le sirva en el exterior, donde su imagen sicológica es poco conocida. Pero el pueblo español ya está vacunado contra sus excesos audiovisuales. Aquí, sobre su imagen permanecen sus reformas del Código Penal, los indultos, la sedición, la malversación, los delitos sexuales, los precios, los pactos bajo cuerda con los independentistas, los intentos de manipular la justicia y de entrometerse en la intimidad de las familias. ¿Cómo piensa liberar positivamente la Comisión Europea sin clasificar la posición de todo su Gobierno sobre la defensa de los valores occidentales en Ucrania? Es un momento crítico en que no es aceptable estar asociado con quienes votan en contra de la ayudad militar de la OTAN frente a la invasión rusa. Los componentes que se manifiestan decididamente antiatlánticos ponen en entredicho la fiabilidad de España ante la Comunidad Internacional. Todo esto será agravado por unos resultados reales que demostrarán que era cierto el rechazo popular detectado por todos los analistas independientes. ¿Por qué no se disuelven las Cortes y se convocan elecciones generales y municipales conjuntamente para evitar a los españoles perder el tiempo durante otro semestre de Gobierno bífido?

Gabriel Elorriaga F.

Ex diputado y ex senador

Gabriel Elorriaga F. fue diputado y senador español por el Partido Popular. Fue director del gabinete de Manuel Fraga cuando éste era ministro de Información y Turismo. También participó en la fundación del partido Reforma Democrática. También ha escrito varios libros, tales como 'Así habló Don Quijote', 'Sed de Dios', 'Diktapenuria', 'La vocación política', 'Fraga y el eje de la transición' o 'Canalejas o el liberalismo social'.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (1)    No(0)

+
0 comentarios