Pídete un Yacht Glovo

Sumud es una palabra árabe que significa algo entre resistencia revolucionaria y merendola con colegas. Esta séptima flotilla desde que se inició el bloqueo marítimo israelí en 2007 tampoco va a poder romperlo aunque sólo sea porque el último que lo intentó, el Mavi Marmara, buque turco, con diplomáticos, políticos, periodistas y médicos, acabó ametrallado por una patrullera israelí y murieron diez personas (2010).

Esta panda pijos con yate, venidos mayoritariamente de la Côte d’Azur, la Costa Brava y la Riviera italiana, llevan más ciber equipos que ayuda real. En cada embarcación va un pijo, un periodista, un famoso y un especialista en RRSS. Hay un par de buques de cien personas, pero la mayoría de embarcaciones son yates y gabarras en las que a lo más irán seis u ocho personas, eso sí, todas con iPhone aunque no quede sitio para voluntarios fetén; total, no tienen Insta.

Las probabilidades de que este convoy de 400 embarcaciones, de las que sólo quedan 45, llegue a Gaza son cero o ninguna, y más les vale: Italia anuncia que retira su escolta y el sátrapa de Moncloa supongo que se habrá dado cuenta de que tocarle los pinreles a Israel en medio de una guerra es un suicidio, así que acabará por hacer algo parecido, eso sí, echándole la culpa al juez Peinado o al Sursum Corda si pasa por ahí .

la cosa es que no creo que a los 350 instagrammers y tiktokers que viajan subiendo fotitos muy monas a sus perfiles, les importen una higa los gazatíes. No me malinterpreten: sí, van a Gaza con una idea primigenia, ayudar, pero en realidad parece que ayudar es la excusa, no el objetivo. No alcanzarán nunca la costa gazatí, pero van a buscar que los detengan y los deporten, incluso que los golpeen y los ataquen en un abordaje, reportaje gráfico de por medio, para poder salir en cualquier televisión, así sea en un concurso de supervivencia en isla y, tras autopromocionar sus RRSS y algún sérum para la piel, nos informarán de que él o ella o ello o elle estuvieron en la Sumud flotilla, oyeron silbar sobre sus cabezas las balas de los genocidas, salvaron a Greta Thumberg de las garras de Ada Colau que la miraba con ojos golositos y no consiguieron entregar su ayuda Pídete un Yacht Glovo porque las Fuerzas del Maligno amenazaron con matarlos si entraban en la zona de exclusión.

Se estima que hay unos 500 voluntarios, de ellos unos 40 españoles. A ver, esto se parece mucho a aquella ONG estúpida y vergonzante que existió a principios de siglo que se llamaba Motores sin Fronteras, una panda de pijardos con 4x4 y SUVs de alta gama, que, con la excusa de ayudar, se corrían raids por el mundo en sus cochazos. Mutatis mutandis, estos neo-groupies con batucada se han hecho una Selfi Flotilla y las star-system de Instagram, tiktok y megáfono-Thumberg se han pasado el crucero subiendo a sus redes videos tope guay and yeah en los que rubias maquilladas como puertas en medio del mar, entre cremas antiarrugas y double serum superhidratante, hablan de Gaza y hasta tienen las güevas de opinar como si tuvieran criterio. Como dice uno de los memes más reposteados, Levanta la mano si te importa una mierda la flotilla.

Los posts de esta gente son acojonantes sin paliativos. Publican cosas como Hamás no existe y lo explican casi al modo terraplanista. Me recuerdan a esos conspiranoicos que afirman que Australia no existe y que todos los pájaros son drones. Estos dicen que el 7 de octubre nunca ocurrió, fake news. O que las judías estaban cabreadas porque no las violaron ese día (¡sic y en video!) y muchos de ellos postean que los judíos se merecen cien Sietes de Octubre. Destaquemos que no distinguen entre judíos, israelíes, hebreos e israelitas, pero, vamos, sería pa’ nota que lo hicieran.

Comandada por Ada Colau, que ya no sabe cómo mantenerse en el machito y seguir chupando del bote sin parecer más ridícula que en los desahucios, cuando cantaba Cantacuentos vestida de payasa, una pandi de rubios y rubias muy bronceados lleva cuarenta días de fiesta ibicenca con baño en altamar y pesca al curricán. Al atardecer, porro con batucada y despedida al Sol, al anochecer porro con pescado fresco y batucada nocturna y al amanecer Saludo al Sol, porro, café con leche y croissants sin batucada que es muy pronto pa’ la resaca.

Lo único bueno de esta sandez colectiva, gritona y hortera, es que la palabra que han usado en Italia, Suecia, EEUU, Francia, japón, Corea y Alemania para definir el engendro ha sido Flotilla, una palabra española. Algo es algo.