Este viernes es el día "D", oficialmente el comienzo de la campaña electoral, aunque en realidad nuestros políticos llevan meses mitineando para convencer a los votantes de que les voten. A mí todas las elecciones me parecen apasionantes, es el momento en que los electores tenemos en nuestras manos el cambiar las cosas de rumbo, o por el contrario consolidar en el poder a quienes lo ostentan. Y las elecciones municipales y autonómicas son especialmente importantes porque es el momento de elegir a quienes se tienen que encargar de facilitarnos la vida cotidiana: tráfico, sanidad, escuelas, ocio... Claro que cada vez que se celebran elecciones municipales y autonómicas leemos los resultados también en clave general, es decir, es como si fuera un ensayo de lo que puede suceder en las elecciones generales.
Sin embargo, yo creo que esa traslación no es del todo real, aunque estas elecciones indiquen la tendencia electoral. Y digo que esa traslación no es del todo real porque mucha gente vota al alcalde de su pueblo o ciudad porque lo ha hecho bien, porque ha mejorado el municipio, porque ha levantado polideportivos, centros de la tercera edad, parques... así que hay ciudadanos que pueden votar a un alcalde de un partido y, sin embargo, no votar a ese partido en las elecciones generales. En todo caso, socialistas y populares se juegan mucho en estas elecciones, porque los resultados se van a leer en clave de futuro, de manera que el PSOE tiene que mandar su actual poder local y autonómico y el PP tiene que intentar ampliarlo. También IU se juega parte de su razón de ser porque es el momento de ver si la política que Gaspar Llamazares ha impuesto a los suyos da sus frutos.
Desde el PSOE se va a intentar poner en valor las leyes de contenido social, intentando que los ciudadanos se olviden del fiasco de su política territorial y de los líos con Batasuna y De Juana Chaos. Los populares, por su parte, intentarán demostrar que todo lo que tiene que ver con el PSOE es un desastre. La campaña promete ser dura porque ambos contendientes van a por todas, de manera que en los próximos días asistiremos a choques de trenes entre los dos grandes partidos, amén de que los partidos nacionalistas intenten consolidar su espacio y votantes y quitándoselos a ser posible a los dos grandes partidos. El futuro está por escribir. Lo decidiremos los ciudadanos el próximo 27 de mayo.
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No(
