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Críticas a su visión tan trágica de la situación del cristianismo

Rouco vuelve a sembrar la discordia con su 'apocalipsis now' de la familia

Rouco vuelve a sembrar la discordia con su 'apocalipsis now' de la familia

El líder de la Iglesia española considera la homosexualidad un problema para la sociedad equiparándolo al aborto
Evitó 'quemarse' en sus relaciones con el Gobierno al evitar en todo momento nombrar al Ejecutivo como culpable

lunes 28 de diciembre de 2009, 07:55h
Como en anteriores ocasiones, división en la sociedad española ante las posturas tan cerradas de los líderes de la Iglesia española. Esta vez, tras la celebración de la Misa de la Familia que cada año tiene lugar en las calles de Madrid, y en la que Rouco Varela, el cardenal arzobispo de esta región y jefe de los obispos del país, elevó el tono crítico a los actuales derroteros por los que camina nuestra sociedad. La prensa, claro, también se divide.
Los medios de comunicación tradicionalmente conservadores se vuelcan con Rouco Varela, a quien dedican sus portadas o aperturas y siguen sus alertas y advertencias sobre la situación de la familia cristiana. La postura contraria la encontramos en periódicos como El País o Público, como era de esperar. Una división generada por sus duras palabras críticas y que generan un duro balance de esta celebración.

Por ejemplo, sobre el poder de convocatoria. Dice Público que Rouco sólo consiguió reunir este año a la mitad de asistentes congregados en 2008: 50.000. El caso es que la misa fue masiva y el gentío reivindicaba “el modelo de la verdadera familia”. Acompañado por una treintena de obispos españoles y más de una docena de cardenales y arzobispos europeos, el cardenal de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela, presidió una Eucaristía en la que dibujó un panorama “oscuro y desolador” para las familias tradicionales por la “facilitación jurídica” del divorcio, el aborto y los matrimonios homosexuales. “Europa sin vosotros se quedaría prácticamente sin hijos”, afirmó Rouco dirigiéndose a las miles de familias cristianas reunidas en la Plaza de Lima.

Aunque sin citar en ningún momento al Gobierno, el arzobispo de Madrid se mostró especialmente crítico con la ampliación de la ley del aborto, diciendo que “nunca se puede legitimar la muerte de un inocente”. “El negar la defensa a la persona humana más inocente y débil, a la persona humana ya concebida, aunque no nacida, cometería una gravísima violación del orden moral”, señaló.

Los miles de asistentes a la Misa de la Familia también pudieron escuchar vía satélite un mensaje del Papa Benedicto XVI que, entre aplausos, reivindicó que “la familia es la mejor escuela, donde se aprende a vivir aquellos valores que dignifican a la persona y hacen grandes a los pueblos”.

Aunque los organizadores del acto no ofrecieron datos de participación, ABC habla de cientos de miles de asistentes, mientras que El País y Público calculan que alrededor de 50.000 personas se dieron cita en la Plaza de Lima, cifra que queda lejos de las 158.000 que asistieron a la misma cita hace dos años y muy por debajo de las 265.000 que, según los cálculos del citado diario, se manifestaron contra el aborto el pasado octubre.


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