Al final serán sólo cuatro agentes privados los que protegerán cada pesquero, ¿será suficiente?

Responsables de las dos principales asociaciones de barcos congeladores y atuneros de España, ANABAC y OPAGAC, se reunieron con la ministra española de Defensa, Carme Chacón, para abordar la situación del "Alakrana" y la logística dispuesta para el traslado de los vigilantes privados y del armamento a la zona de operaciones.

Finalmente serán 52, y no 71, como comunicó el ministerio español, los agentes que saldrán de Madrid el próximo viernes en un avión del Ejército del Aire hacia Seychelles, donde está previsto que lleguen el sábado, informó la Confederación Española de Pesca (Cepesca), que agrupa a ambas asociaciones.

Allí, el personal de seguridad se embarcará junto a la flota española, integrada por 13 barcos, que permanece amarrada en Puerto Victoria a la espera de su llegada.

Cuatro vigilantes por barco

A bordo de cada pesquero viajarán cuatro vigilantes, según precisaron las mismas fuentes, que subrayaron que todos ellos cuentan con adecuada formación y entrenamiento militar.

Según la normativa aprobada en España, sólo empresas de seguridad de ámbito estatal pueden embarcar agentes con armas de guerra en buques mercantes y pesqueros que naveguen bajo bandera española en aguas en las que exista grave riesgo para la seguridad.

La nueva norma también obliga a los vigilantes a hacer "un uso limitado" de las armas de guerra, que "tendrá como único objetivo la prevención y disuasión eficaz de posibles ataques, pudiendo ser utilizadas en caso de necesidad como medio de defensa para repeler agresiones armadas de forma adecuada y proporcional".

Durante la reunión, Chacón explicó a las asociaciones de congeladores y atuneros que el "Alakrana" permanece vigilado por la fragata de combate "Méndez Núñez" y el avión de vigilancia marítima P3-Orión.

Normativa de las armas

Según la normativa aprobada, sólo empresas de seguridad de ámbito estatal pueden embarcar agentes con armas de guerra en buques mercantes y pesqueros que naveguen bajo bandera española en aguas en las que exista grave riesgo para la seguridad.

Los agentes podrán llevar armas de fuego de calibre igual o superior a 12,7 milímetros, que utilicen munición con vaina de ranura en el culote y no de pestaña o reborde.

Asimismo pueden usar armas de fuego con munición de 5,45 por 39,5; 5,56 por 45; 7,62 por 39; y 7,62 por 51 NATO.

La nueva normativa también obliga a los vigilantes a hacer "un uso limitado" de las armas de guerra, que "tendrá como único objetivo la prevención y disuasión eficaz de posibles ataques, pudiendo ser utilizadas en caso de necesidad como medio de defensa para repeler agresiones armadas de forma adecuada y proporcional".

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