La portavoz de la Generalitat, una de las figuras que más ha ascendido en los últimos años dentro del equipo del barón valenciano, será la encargada de dirigir la campaña electoral. De su cabeza saldrá toda la organización de actos y la estrategia a impulsar en una ´guerra electoral´ que se prevé como la más dura por el ´ambiente Gürtel´ que empapa la política valenciana desde hace más de un año.
Otro portavoz como
Blasco -en su caso en el Grupo Popular de Les Corts- será el encargado de redactar el programa electoral de los populares valencianos. El también conseller de Solidaridad ha sido uno de los grandes apoyos del presidente del Consell en la última fase de la polémica político-judicial.
De hecho, en estos últimos días, Blasco se encargó de reforzar la idea de que
Camps seguirá ´pase lo que pase´. Es decir, el dirigente popular reivindicó la autonomía de la dirección valenciana para tomar sus decisiones, ante las dudas que puedan surgir en la calle Génova, sede nacional del PP de
Mariano Rajoy.
El equipo de dirigentes fuertes en la campaña lo completarán dos de los vicepresidentes del Gobierno valenciano:
Vicente Rambla y
Gerardo Camps. Aunque tengan un papel más secundario deberán coordinar a todos los candidatos municipales. A su vez, Rambla -en sustitución de Víctor Campos- será el secretario de un Comité Electoral que mantendrá a todos los integrantes de la campaña de 2007.
El presidente del PP valenciano quiso, con estos anuncios, romper cualquier tipo de duda sobre sus intenciones. De hecho, el acto -´Cumplimos: 2003-2010. Tots Junts anem a més (Todos juntos vamos a más)´- celebrado en el Palau de la Música inicialmente estaba pensado para hacer balance de gestión. Sin embargo, Camps lo convirtió en una junta directiva espontánea para hacer las designaciones.
De la elección de Camps llama la atención que el vicepresidente tercero del Consell,
Juan Cotino, no tenga ningún papel de protagonismo. El también conseller de Medio Ambiente también ha sido el ´cabeza pensante´ de toda la estrategia para desacreditar lo que el propio presidente bautizó como una campaña de "acoso y derribo", en referencia al caso de los trajes.
En su discurso, Camps, rodeado por todos los miembros del Consell, aseguró que su partido se propone lograr los mejores resultados electorales de la historia de la Comunitat Valenciana. "Hace años tomé una decisión personal, una responsabilidad con esta tierra que me vio nacer. Nací valenciano y moriré valenciano al servicio de los valencianos", gritó provocando el aplauso de todos los asistentes.
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