El partido liberal progresista Demócratas 66 (D66) ha ganado las elecciones legislativas de Países Bajos celebradas este miércoles, según los sondeos a pie de urna.
Este resultado supone un vuelco político tras la derrota de la ultraderecha y podría abrir el camino para que su líder, Rob Jetten, se convierta en el primer ministro más joven y abiertamente gay del país.
El partido D66 habría conseguido votos de casi todas las grandes formaciones, especialmente del bloque ecologista y socialdemócrata GL-PvdA, pero también del liberal VVD, del centrista NSC y de la ultraderecha de Geert Wilders (PVV). Con este resultado, D66 logra el mejor resultado de su historia y se consolida como la primera fuerza del país, un desenlace impensable hace unas semanas, cuando Wilders lideraba las encuestas con claridad.
Derrota de la extrema derecha
Rob Jetten, de 38 años, ha visto disparada su popularidad tras una campaña centrada en un mensaje optimista y positivo, similar al lema "Sí, se puede", con el que prometía poner fin a la era política dominada por el anterior ganador de las elecciones neerlandesas, el ultra Wilders. Tras conocerse los resultados electorales, Jetten declaró: "Hemos demostrado no solo a los Países Bajos, sino también al mundo, que es posible derrotar a los movimientos populistas y de extrema derecha".
Sin embargo, ningún partido obtendría la mayoría necesaria para formar Gobierno en solitario. Por ello, será necesaria una coalición de al menos 4 o 5 partidos para alcanzar los 76 escaños que otorgan la mayoría absoluta.
Wilders es el gran perdedor de estos comicios, al dejarse 12 escaños y ceder el liderazgo parlamentario que le daría prioridad para negociar Gobierno. El breve periodo del partido ultranacionalista y antiinmigración PVV parece haber terminado, ya que los partidos tradicionales han descartado unirse a ellos. El líder ultraderechista reconoció la "pérdida importante" que sufrió su partido, pero prometió continuar en política "hasta los 80 años".
Resultados de las otras formaciones
El partido liberal VVD, liderado por Dilan Yeşilgöz (sucesora del ex primer ministro Mark Rutte), obtendría 23 escaños, perdiendo solo uno con respecto a la actualidad. El bloque de ecologistas y socialdemócratas GroenLinks-PvdA lograría 20 escaños, perdiendo 5.
El partido democristiano CDA sería otro de los grandes ganadores, sumando 19 escaños, 14 más que en la actualidad. Por su parte, el euroescéptico JA21 pasaría de 1 a 9 asientos, y la extrema derecha de Foro para la Democracia (FVD) crecería de 3 a 6 escaños. El movimiento campesino BBB caería de 7 a 4, y el Partido Socialista (SP) bajaría de 5 a 3. El partido centrista NSC, que irrumpió en las elecciones anteriores con 20 escaños, desaparecería totalmente del Parlamento.
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