Dos vestidos por novia

Mayo y junio son los meses por excelencia de bodas y comuniones. Para abrir boca, Ifema ha adelantado al mes de abril la pasarela Cibeles Madrid Novia (antes Puerta de Europa), que estrena nombre y es organizada por primera vez por la institución ferial. Además de los diseños de los grandes nombres de la moda, la feria acogerá las colecciones de 165 fabricantes nacionales e internacionales.

Aunque las previsiones, según los expositores, no son todo lo buenas que se podría desear, este año dos ‘baby boom’ prometen ayudar al sector. La generación del 76, la numerosa desde que se hacen recuentos -nacieron  677.456 bebés- se encuentra en la edad media elegida por los españoles para casarse, es decir entre los 33 y los 35 años. Y en los próximos años, el ‘baby boom’ más reciente- los 492.527 niños nacidos en 2007- asegura la demanda de trajes de Comunión.

Creatividad 'anticrisis'
Los creadores parece que se han inclinado en esta ocasión por vestidos vaporosos y de corte romántico, con corpiños, organzas de seda, y con adornos de plata y cristal. En general, el pabellón 14 del Ifema luce un blanco deslumbrante. Pero también hay quién innova y se atreve a salirse de los márgenes de una boda tradicional y católica. El diseñador de alta costura José María Soler explicó a Madridiario que sus novias visten de corto y con llamativas plumas para “una boda civil, más desenfadada y atrevida”. “Hay que agudizar la creatividad, las novias de la crisis serán las más originales”, añadió.

Y es que a la preocupación por la crisis en el sector es patente y se agrava en el caso de las comuniones por ciertos conflictos con las parroquias. “El sector de las comuniones tiene un problema muy grave y es que los párrocos están bloqueando las celebraciones para que los niños la celebren más mayores. El año pasado lo pasamos muy mal”, explicó Horacio, del Grupo Novia. Aunque eso sí, que nadie confíe en grandes bajadas de precios, al menos por parte de los fabricantes, por que la mayoría considera que sus precios están muy ajustados.

Mantillas y velos
La parafernalia que envuelve a los vestidos de novia es complicadísima y muchas veces sorprendente. Sólo en los velos hay una variedad infinita y su elaboración –si se desea uno elaborado cien por cien a mano- puede requerir hasta seis meses. Los más populares son de encaje de Granada, un ornamento floral bordado sobre un tul de seda.

Las mantillas, asiduas de las bodas españolas pueden ser también de varios tipos. “La más popular es la goyesca, que es una prenda de recato para ir a misa y tapa la cabeza y parte de la espalda”- explica Vicente Cano, de Artesanía Florencia. La de media luna era propia de las clases más altas valencianas y estaba fruncida a la altura de la cintura. Y la de terno, de tres picos “llegó a España procedente de Bruselas e Inglaterra”, añade Cano.

Además de trajes, velos y mantillas en la feria pueden encontrarse tocados, espectaculares vestidos de fiesta para las damas de honor y, por supuesto, trajes masculinos para novios e invitados. Aunque en las bodas tradicionales el novio tiene reservado el papel más ‘gris’ se le permiten ciertos atrevimientos como zapatos de charol o trajes tan blancos como el vestido de novia.

Y como escaparate de excepción, los diseños de grandes modistos como Hannibal Laguna,  Modesto Lomba, Elio Berhanyer, Juan Duyos, Roberto Torretta o Petro Valverde, desfilarán este jueves y este viernes por la Pasarela Cibeles. En total, durante los dos días se presentarán 22 colecciones.


Entre todas las propuestas presentadas en Ifema, las tiendas seleccionarán aquellas que se presenten al público. Al final del camino, para todas estas prendas está el altar, o en su caso, el juzgado.

La feria Cibeles Madrid Novia abrirá sus puertas hasta este domingo en horario de 10.00 a 20.00 horas, excepto el último día, cuando cerrará a las 19.00 horas. La entrada es exclusivamente para profesionales.