Así nació Sin Fronteras, conjunto que hoy festeja ocho años, y que lo celebrará con dos conciertos mañana y el domingo, en el Teatro Municipal Alberto Saavedra Pérez.
Wilson Molina, director y fundador comenta que decidió reunir a los músicos, cautivado por las melodías sureñas que conoció a fondo gracias a su esposa, la cantante Esther Marisol, que precisamente será la invitada de honor para los recitales de esta noche y mañana.
Es así que tomó contacto con Weimar Baldiviezo, de destacada carrera junto a sus hermano, integrantes de los conocidos Canarios del Chaco; el baterista Luis Guillén a quien Wilson conoció en un anterior proyecto de música andina y el violinista Santos López, también se unieron al proyecto.
En septiembre de 2001 lanzaron su primer disco Encuentro, un trabajo dedicado a Tarija y la región del Gran Chaco. En 2003 presentaron Paso a paso, “una propuesta más armada con coros y nuevos integrantes e instrumentos”: Yuliano Encinas en el bajo eléctrico, y Roberto Morales en vientos como saxo y flauta.
Después, por motivos profesionales, Guillén y López, tomaron otros rumbos y ello marcó, ya en 2005, una nueva innovación musical. "Así surgió Vuelvo a vivir, nuestro tercer álbum en el que creo que alcanzamos una nueva dimensión musical que ya marca la identidad del grupo, y que contiene un 80 por ciento de composiciones propias"
Besitos de fuego, el tema emblemático de Sin Fronteras, ganador de varios premios en radioemisoras del Chaco y de la sede de Gobierno, será el punto de partida para disfrutar de los espectáculos de este fin de semana, que arrancan a las 19.30.