Las nuevas tecnologías ya logran superar a los métodos tradicionales. Esto está ocurriendo en la práctica totalidad de los ámbitos, y los juegos de casino no iban a ser menos. El casino físico al uso es cada vez menos concurrido debido a que existen, y evolucionan día a día más rápido, los juegos de casino online. Este es el caso de diversas páginas que, como es.royalvegascasino.com, significan el tránsito definitivo a internet.
El casino físico incurre en desventajas si se compara con el casino online. La primera de ellas y más acuciante es que para el primero es necesario desplazarse para que el usuario juegue, mientras que en el segundo el interesado puede hacerlo desde su propia casa o cualquier lugar. Lo único que se necesita es un dispositivo móvil y una buena conexión a internet.
La revolución de las apps en los casinos online
Jugar sin desplazarse a unas instalaciones, obtener promociones online, mantener el dinero de forma más segura según la propia cuenta… todas estas ventajas son las que introduce el casino online respecto al físico. Ahora, además, las aplicaciones móviles acercan mucho más el juego a los usuarios, los cuales ni siquiera tienen la necesidad de situarse frente al ordenador para disfrutar de las apuestas.
El casino online también posee diversas promociones por altas de nuevo usuario, como tiques de bienvenida con un dinero invertido para probar el juego o la apuesta deseada. Esto es una de las razones principales de que cada vez el casino online guste más que el físico.
Por no hablar de la concurrencia de que gracias a disponer de estos juegos en el propio smartphone de cada uno, los jugadores tienen la posibilidad de jugar en el momento que quieran y donde quieran. Esto se une a que existe una gran variedad de juegos de los que hacen gala estas apps.
El casino físico es mucho más directo
Pero por otra parte, si lo que el jugador desea es vivir el ambiente propio de un casino, las instalaciones físicas son lo único que se lo pueden dar. A día de hoy no se ha inventado una tecnología que haga sentir al usuario como si estuviera de forma física en el casino, con un croupier delante, observando bien al resto de los jugadores y “escuchando” cada céntimo invertido. Es decir, vivir el ambiente real de un casino.
Si bien es cierto que en la actualidad sí que existen salas de casino online en las cuales, mediante una cámara de vídeo, se puede observar a los jugadores y al croupier de turno, todavía no se alcanza el mismo realismo que en un casino físico.
Al final ello trata del romanticismo, de las salas tradicionales donde siempre ha acudido todo el mundo y que ahora se ven relegadas por el mundo de internet. No obstante, las cifras que consiguen estas instalaciones aún no son demasiado bajas y consiguen reinventarse. ¿Cómo? Sirviendo de punto de reunión de amistades para jugar o apostar a lo que ellos deseen.
