La ciudad sufrió ayer un total caos

Un video de TVN Canal 2 muestra escenas, con audio ambiental, cuando el dueño de un “diablo rojo” procedió a prenderle fuego, luego de rociarle gasolina en la parte interior trasera.  Mientras los antimotines trataban de arrancar el bus, para moverlo e impedir que obstruyera el libre tránsito, el propietario abrió la puerta trasera, roció la gasolina e incendió el bus. 

Hoy continúa la huelga de transporte, mientras el presidente Torrijos se limitó a pedir excusas a los usuarios y a exhortar a los transportistas a detenerse en sus acciones de protesta. Pero no dijo nada sobre el Transmóvil, ni si va a darle audiencia a los transportistas.

Hasta altas horas de la noche las paradas eran sitios de largas filas de usuarios, que se disputaban el derecho a entrar a cualquier bus que se detuviera, al cual asaltaban por sus puertas delantera, trasera y por las ventanas.  Las rutas fueron alteradas, el gobierno puso a circular transportes especiales, y los corredores abrieron sus garitas para que el tráfico circulara gratuitamente.  Esta acción ha sido entendida como una argucia de los corredores, quienes están siendo acusados e investigados por la sociedad civil, que espera demostrar que en los contratos hay un negociado.

Los transportistas insisten en hablar con el presidente, y la ciudadanía espera que dicha audiencia sea concedida, porque cada día de paro es perjudicial para la clase popular, que sufre las angustias de posibles emergencias sin poder solucionarlas por la falta de movilización.