Almeida aspira a 'divorciarse' en 2023 de una Villacís que ve opciones de repetir coalición

La pensada puesta en escena de ediles de Partido Popular y Ciudadanos intercalados para la foto ha envuelto a José Luis Martínez-Almeida y Begoña Villacís en el tercer aniversario de su Gobierno en coalición. "El matrimonio que nunca he tenido", como define el alcalde su relación con la vicealcaldesa, se ha piropeado ante el estanque del Retiro esta mañana, pero el regidor, por ahora, no la invita a subirse a su barca en 2023. "No ha habido ningún ofrecimiento, aunque sí valoro y aprecio su trabajo y el de los concejales de Cs", ha manifestado el alcalde sobre la posibilidad de llevarla a la orilla del PP en los próximos comicios municipales.

Su unión, que resiste a presuntos casos de espionaje y estafas, se ha resquebrajado al final del acto de balance de los tres años compartidos en Cibeles, pero la garantizan para lo que resta de mandato. "Estamos hechos a prueba de fuego", ha presumido la vicealcaldesa ante un regidor que descarta un aumento de la tensión entre socios en los próximos meses ante la proximidad de la cita con las urnas. "Estamos curados de espanto desde el punto de vista político y de gestión. No creo que por que se acerquen las elecciones pueda haber más tensiones", ha calmado Almeida.

Ambos coinciden en que "lo mejor está por venir para Madrid" en los 11 meses que les resta liderando el Ejecutivo municipal juntos, pero difieren en el diagnóstico anticipado de lo que ocurrirá tras el 28 de mayo de 2023. Begoña Villacís augura "más años para continuar con el proyecto" conjunto iniciado tras conocerse en la bancada de la oposición en 2015 y su pacto en 2019. De hecho, cree tener "muchas opciones de repetir" como tándem al frente de la Corporación, aunque lo supedita a no incorporar nuevos compañeros de viaje a la derecha del Partido Popular. "Si de mí depende, la fórmula sería Cs-PP, no Vox-Cs-PP".

Sin embargo, las encuestas actuales no auguran que el acuerdo a dos se reedite o, al menos, el ahora vigente. Y ahí podría entrar en juego el factor Vox que la vicealcaldesa trata de evitar. Por su parte, el dirigente 'popular' se desentiende a día de hoy de la tarea de encontrar nueva pareja, que de alzarse con la victoria y cumplirse los pronósticos sería femenina ante posible salto de Rocío Monasterio a la política local. "No venimos a liderar bloques, sino a liderar mayorías", ha subrayado. Así, ha incidido en que aspira a gobernar en solitario. "La respuesta a la pregunta de si se puede repetir -la coalición con Cs- la tendrán que dar los madrileños", ha señalado esquivo.

Un Gobierno "que va como un tiro"

Hasta el recuento de papeletas, Almeida y Villacís garantizan continuidad de "uno de los Gobiernos de coalición más sólidos y serios", en palabras de la vicealcaldesa. Su objetivo, "seguir demostrando no solo que el liberalismo funciona, sino que la confianza, la lealtad y la palabra tienen que ser términos que vuelvan a ponerse de moda en la política". Ahí, y "sobre todo en el respeto", reside la clave para que el Ejecutivo vaya "como un tiro", ha incidido.

Para el primer edil matritense el faro que los ha guiado en estos más de 1.000 días de convivencia de dos partidos en Cibeles ha sido "el ejemplo y la entereza de los madrileños" ante las sucesivas adversidades. Asimismo, ha ligado el "éxito" de estos tres años al desempeño de los concejales de área y de distrito. "Hemos acertado y nos hemos equivocado tomando decisiones, pero lo que nunca ha faltado ha sido su trabajo las 24 horas del día", ha destacado.

Abierto el capítulo de las equivocaciones, el alcalde ha reconocido que fallaron con el programa de aparcamientos disuasorios, que "no dio el resultado que queríamos". La vicealcaldesa, por su parte, ha admitido haber errado en el caso de las mascarillas. "Hemos pedido perdón porque nos la colaron", ha indicado en relación a los más de seis millones que Luis Medina y Alberto Luceño se agenciaron en comisiones ocultas por un contrato de material sanitario durante la pandemia, uno de los mayores escándalos de la legislatura. Como aval de que su Gobierno a dos ha funcionado han resaltado el "récord" del Consistorio ejecutando 9 de cada 10 euros presupuestados en 2021.