La exigencia de una amnistía por parte de Carles Puigdemont para apoyar a Pedro Sánchez en la investidura, ha supuesto un terremoto político, pues aunque era una condición esperada, hacerla real genera dificultades.
El PSOE no lleva en su programa la posibilidad de una amnistía para solucionar el conflicto catalán, aunque sus socios de Gobierno, Sumar, sí abogan por ella.
Dentro de las filas socialistas hay diferentes opiniones, pero 2 líderes históricos han mostrado ya su rechazo a esta medida, por lo que el fantasma de la repetición electoral vuelve de nuevo.
Felipe González se posicionó el mismo día de las declaraciones de Puigdemont y mostró su total rechazo a esta medida además de criticar la actual gestión progresista.
Ahora se ha sumado Alfonso Guerra, otro histórico del partido. El que fuera vicepresidente del Gobierno ha instado a que no se apruebe la amnistía por ser una "condena a la Transición".
Critica la reunión entre Díaz y Puigdemont
Así de contundente se ha mostrado en una entrevista en la Cadena COPE. Guerra ha criticado también el viaje de Yolanda Díaz a Bruselas para reunirse con Puigdemont y lo ha tildado de "infamia".
También ha sido muy crítico con Puigdemont, a quién ha tachado de "gángster de poca categoría" por crear la república y después huir "cobardemente" fuera del país.
Ha pedido "como socialista y como demócrata" que no se autorice la amnistía porque sería negar el esfuerzo de los socialistas de antaño. Ha recordado que "estuvieron con penas de muerte en las cárceles" para que la Transición pudiera llevarse a cabo.
"Que ahora digan que todo aquello fue un régimen impuro, me parece insoportable. Por tanto, yo lo que digo es, no lo hagan ustedes porque es muy grave", ha advertido.
Ha cargado también contra el actual rumbo socialista por llevar a cabo la "técnica del salchichón", a la que ha denominado así porque, en su opinión, han ido quitándole atribuciones al sistema democrático "poco a poco".
"Cortan una rodajita, ahora los indultos, ahora desaparece el delito de sedición, ahora la malversación, ahora la amnistía...y después vendrá la autodeterminación", ha reprochado.
Con la negativa de Guerra, la negativa a la amnistía va ganando fuerza dentro del PSOE, especialmente dentro de las personalidades con peso dentro de la formación.
Sin el apoyo de Junts la investidura de Sánchez se aleja salvo que, con el recuento de los votos nulos (si lo autoriza el Constitucional), consiguiese recuperar ese escaño y poder así bastarle la abstención de Junts.
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