La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha roto su silencio casi a las 14:30, tras horas de especulación sobre si había apoyado la moción de censura en Murcia, que ha generado un terremoto político en todo el país.
Arrimadas ha escrito en redes sociales lo siguiente: "Llevamos meses intentando que el PP de la Región de Murcia cumpla el acuerdo para combatir la corrupción y el escándalo de las vacunaciones irregulares".
Además explica que "ha sido imposible". Y por eso, anuncia: "Abriremos una nueva etapa de regeneración liderada por las políticas de Ciudadanos".
Más tarde, mostraba un vídeo con la imagen de la que será la candidata alternativa de Ciudadanos en la moción de censura de López Miras, actual presidente de la Región de Murcia, del PP.
Dicha candidata será Ana Martínez Vidal, actual consejera de Empresa del gobierno murciano y líder de Cs en la región.
La bomba de Arrimadas
Arrimadas ha dado la vuelta a la política nacional con esta negociación con el PSOE, cuando menos se esperaba. Al parecer, Cs ha estado pactando con los socialistas esta moción en Murcia durante semanas y en los últimos días con más fuerza, estando el ministro y número 2 del PSOE, José Luis Ábalos, involucrado en dichas negociaciones.
Arrimadas, sabedora de que tras la debacle electoral en Cataluña el pasado 14 de febrero, el futuro del partido está en el aire, apuesta por un vuelco total en la estrategia política.
Ese cambio no ha sido apoyado por muchos dirigentes de Cs, que parece que anticipan una posible rebelión interna. De momento, en Andalucía no se llevará a cabo ninguna ruptura con el PP, y en Castilla y León, donde es vicepresidente regional Francisco Igea, rival y enemigo de Arrimadas para liderar Ciudadanos a nivel nacional, también se ha parado la sangría.
En Madrid, la vicealcaldesa de la capital, Begoña Villacís, se negó a hacerlo y apoyó al alcalde Almeida, del PP, y al parecer iba a hacer lo mismo, eso asegura, Ignacio Agiado con Ayuso en la Comunidad de Madrid. Pero la presidenta regional optó por convocar elecciones ante el peligro de que le movieran el asiento.
Reacciones
Algunas voces en el partido han levantado su voz, entre ellos el otrora diputado Toni Cantó, que procede de la época de Rosa Díez en UPyD y posteriormente muy cercano a Albert Rivera cuando éste dirigía el partido naranja.
"Cualquiera que me conozca puede imaginar qué pienso de la decisión que ha tomado mi partido en Murcia y de las consecuencias que eso acarrea. Como gran parte de la ejecutiva, no era conocedor de esta decisión. He pedido una convocatoria urgente para trasladar allí mi opinión", dijo Cantó en redes.
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