La Policía ha detenido a Álvaro Pasquín Mora, un joven de 32 años que llevaba en la lista de los 10 fugitivos más buscados desde 2020.
Conocido como 'el fugitivo de los tatuajes', el joven estaba requerido por la Justicia por un delito de abuso sexual en 2017. Unos hechos que prescribían el próximo 31 de julio, pero que gracias a la colaboración ciudadana se le ha podido detener a pocos días de la prescripción del delito.
5 años escondido en un cobertizo
Según ha informado la Policía Nacional, Álvaro Pasquín llevaba oculto en un cobertizo desde hace 5 años donde apenas tenía relación con nadie.
Pedidos a domicilio e identidad falsa
En 2020 se emitió la reclamación judicial para su detención y al no dar con él y agotar todas las vías de investigación, la Policía le incluyó en la lista de fugitivos y solicitó colaboración ciudadana para encontrarlo.
En el marco de la referida campaña se obtuvieron informaciones a través del correo habilitado para ello losmasbuscados@policia.es que, junto con las tareas de averiguación de la Sección de Localización de Fugitivos, hicieron que se diese con el paradero de este prófugo.
Ha permanecido oculto en un cobertizo trasero de una vivienda de Colonia Jardín (Madrid) durante estos años y ha subsistido con las ganancias de negocios online y pidiendo a domicilio utilizando nombres falsos.
Sin relación con nadie
Ha trascendido que también cambió su aspecto para pasar desapercibido el poco tiempo que salía fuera de su escondite. Se tiñó de rubio y se dejó crecer el pelo.
En este tiempo no ha tenido trato con amigos y familiares y se cree que pasaba el tiempo encerrado jugando a videojuegos y viendo la televisión.
Al parecer, los dueños de la vivienda contigua no eran conocedores de su situación, por lo que no se han detenido a más personas por posible colaboración.
Tras su detención y puesta en manos de la autoridad judicial, se ha decretado su ingreso en prisión.