En las últimas semanas los incendios han vuelto a ser los protagonistas en diferentes partes de España calcinando todo a su paso. Una gran cantidad de incendios son intencionados, pero no solo estas acciones acarrean consecuencias.
Como ha recordado Legálitas, la normativa española también contempla sanciones para acciones de riesgo aunque no deriven en un incendio. Además, negligencias o descuidos que acaben con un fuego pueden suponer penas de cárcel.
Fumar en zonas forestales, tirar una colilla desde el coche o hacer barbacoas en zonas restringidas, entre otras acciones, pueden salir caras, incluso si no se provoca un incendio.
Actividades prohibidas
Según la normativa giente (Ley de montes), las siguientes acciones están prohibidas durante la época de verano:
- Uso del fuego en espacios forestales o en su entorno (zona de influencia forestal). Es decir, está prohibido hacer barbacoas, quemas agrícolas o de rastrojos, incluso en fincas privadas o áreas recreativas, salvo autorización expresa. Además, está prohibido encender velas, hogueras o fuegos artificiales en zonas forestales o colindantes.
- Uso de maquinaria que pueda generar chispas. Prohibido el uso de motosierras, radiales, desbrozadoras, cosechadoras, etc. si no cuentan con medidas preventivas adecuadas. Incluso en algunas regiones, se limita la actividad agrícola o forestal en determinadas franjas horarias (por ejemplo, entre las 13:00 y las 19:00).
- Circulación de vehículos a motor por pistas forestales. Queda restringido el acceso con coches, motos o quads a montes y caminos rurales, salvo autorización o si se trata de propietarios o servicios.
- Acampadas y actividades recreativas sin autorización. No se permite acampar libremente ni realizar actividades al aire libre sin informar y obtener permiso previo de la administración forestal.
- Tirar colillas, basura o material inflamable. Arrojar una colilla desde el coche, incluso si está apagada, se considera una infracción grave.
Sanciones por negligencia o imprudencia
Las comunidades autónomas, en virtud de la Ley de Montes (Ley 43/2003), pueden imponer multas administrativas cuando se incumple la normativa de prevención y uso del fuego.
Fumar en una zona forestal está considerado una infracción grave, incluso aunque no se provoque un incendio. La multa es de entre 100 y 1.000 euros.
Cuando se comete una infracción grave, como es por ejemplo el uso de fuego o actividades prohibidas con riesgo real de incendio, la multa asciende entre 1.001 y 100.000 euros.
Si debido a una infracción grave se provoca un incendio, la sanción puede llegar al millón de euros.
Posibles penas de cárcel incluso si no hay intencionalidad
El Código Penal también contempla sanciones incluso cuando el incendio se produce sin dolo (sin intención directa), pero como consecuencia de una imprudencia grave.
Los incendios forestales provocados por una imprudencia grave pueden acarrear penas de prisión desde 1 año y 6 meses hasta los 3 años y multa de 9 a 18 meses.
Se establece la pena inferior en grado a la fijada para el incendio provocado en casos de especial gravedad: cuando afecta a una superficie de considerable importancia, se derivan graves efectos erosivos en los suelos, altera significativamente las condiciones de la vida animal, vegetal, afecta a un espacio natural protegido, afecte a núcleos de población o lugares habitados, se provoque con grave riesgo de propagación por las condiciones climatológicas o del terreno o cuando ocasione un grave deterioro o destrucción de recursos afectados.
Si es un incendio menor, las penas suelen ser de 6 meses de prisión a un año y multa de 6 a 12 meses.
Desde Legálitas han recordado algunos casos como la de un ganadero en Galicia que fue condenado a 2 años de prisión y 150.000 € de indemnización tras quemar maleza sin permiso, lo que causó un incendio que afectó 70 hectáreas. O el caso de un agricultor en Andalucía sancionado con 30.000 € por usar una desbrozadora sin protección en época de riesgo alto, lo que originó un incendio de 25 hectáreas.
El verano es la temporada de mayor riesgo de incendios, por lo que es importante ser cuidadosos y respetar la normativa para evitar los incendios, que dadas las condiciones climáticas actuales, son más devastadores y peligrosos.