El Gobierno lamenta la decisión de Argelia y confía en mantener "las relaciones de cooperación"

Como un jarro de agua fría ha caído sobre el Gobierno el anuncio de Argelia de suspender el 'Tratado de amistad, buena vecindad y cooperación' con España por su giro respecto al Sáhara. Desde La Moncloa, han lamentado la decisión de "este país vecino y amigo", al tiempo que han manifestado su confianza en "preservar las especiales relaciones de cooperación en entre los dos países, en beneficio de ambos pueblos".

Poco después de dar por zanjada la crisis diplomática con Marruecos, con la aceptación de su propuesta para la autonomía del Sáhara Occidental, el Gobierno se ha topado con la decisión de Argelia de suspender el tratado de amistad y cooperación. Para Abdelmadjid Tebboune, "las autoridades españolas han emprendido una campaña para justificar la posición que han adoptado sobre el Sáhara Occidental, y que supone una violación de sus obligaciones legales, morales y políticas como potencia administradora del territorio".

Y la reacción al anuncio de Argelia no se ha hecho esperar. El Gobierno de Pedro Sánchez ha vuelto a referirse a este país como "vecino y amigo" y ha aseverado que continúa la "plena disponibilidad para seguir manteniendo y desarrollando las especiales relaciones de cooperación entre los dos países, en beneficio de ambos pueblos".

El Ejecutivo ha reiterado su "compromiso pleno con el contenido" del 'Tratado de amistad, buena vecindad y cooperación', que fue sellado en 2002, y ha recordado a Argelia "uno de los principios que lo conforman".

"Entre esos principios se encuentra la igualdad soberana de los Estados, de no injerencia en los asuntos internos y del respeto del derecho inalienable de los pueblos a disponer de ellos mismos".

La decisión de Argelia llega después de haber llamado a consultas al embajador de España en el país, cuando salió a la luz la carta enviada por Sánchez al rey Mohamed VI trasladando su apoyo a la propuesta marroquí para la autonomía del Sáhara. Además, hace poco más de un mes, Tebboune acusó al jefe del Ejecutivo de "haber roto la relación de cercanía" entre ambos países con este cambio de postura.