Las bases de Junts han decidido romper la coalición con ERC y que el partido salga del Govern de Pere Aragonès. El resultado ha sido de 55,73% de votos en contra, 42,39% a favor y 1,88% abstenciones.
Y de los 6.465 militantes llamados a responder la pregunta "¿quieres que Junts continúe formando parte del actual Govern de la Generalitat de Cataluña?", la participación sólo alcanzó el 79,18%.
¿Qué va a pasar a partir de ahora?
Pues está previsto que la Ejecutiva del partido se reúna para analizar este resultado, ya que supone la ruptura de la alianza entre ERC y Junts, y puede tener consecuencias en el seno de la formación liderada por Laura Borràs y Jordi Turull.
6 años de coalición que se destruyen en una semana
La salida de Junts del Ejecutivo supone la ruptura de una coalición que ha estado gobernando Cataluña desde 2016.
De manera que, a partir de ahora, ERC gobernará en solitario, puesto que en los últimos días los republicanos han dejado claro que "están preparados para todos los escenarios" y no planean convocar elecciones.
Sin embargo, con solo 33 diputados en el Parlament, Aragonès se verá obligado a buscar el respaldo de otras formaciones, entre ellas el PSC y los comuns, para sacar adelante sus proyectos.
Por tanto, el primer reto que tendrá el Govern republicano será el de tratar de aprobar los Presupuestos de la Generalitat de 2023.
Ahora el 'president' se encuentra reunido con su equipo de confianza en el Palau de la Generalitat para analizar la decisión de JxCat y no hará ninguna valoración pública, a la espera de que la cúpula de JxCat se pronuncie en rueda de prensa.
Crisis en el Govern
Esta crisis de gobierno comenzó el 27 de septiembre, cuando el grupo parlamentario de Junts amenazó con someter a una cuestión de confianza al 'president', si no cumplía con el acuerdo de investidura.
Esto desembocó en la destitución como vicepresidente,Jordi Puigneró por "pérdida de confianza", al no haber informado con antelación de la advertencia del partido.
Hubo varios intentos para tratar de acercar posturas con ERC para salvar la coalición de gobierno, presentando propuestas que garantizaran el cumplimiento del acuerdo, pero JxCat decidió el pasado lunes preguntarle a sus bases si querían permanecer en la coalición.
El ex presidente Torra le dio "su enhorabuena"
Por último, las reacciones entre diputados y otros representantes de Junts no han tardado en hacerse públicas: el ex presidente de la Generalitat Quim Torra ha celebrado que los militantes hayan decidido romper con ERC a través de un tuit en el que ha transmitido su "enhorabuena".
La consellera de Derechos Sociales, Violant Cervera, alabó la alta participación en la consulta, poniendo a los militantes "ejemplo de compromiso con la democracia interna del partido (...) Ha sido un auténtico honor y una gran responsabilidad ejercer durante este año y cuatro meses de consejera de Derechos Sociales. Servir en el país ya su gente siempre ha sido, es y será un honor y un deber para mí", ha determinado Cervera.
Y la reacción del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre la salida de Junts del Govern ha sido esta:
"En estos momentos tan difíciles, el valor de la estabilidad es fundamental. Por eso, sea cual sea la coyuntura de la Generalitat, el Ejecutivo central va a tener la mano tendida para lograr el reencuentro de la sociedad catalana”, ha declarado Sánchez.
Albiach declaró "Dos años perdidos y un gobierno roto, en medio de una crisis económica, nunca es buena noticia".
Desde la oposición, el líder del PPC, Alejandro Fernández, ha tirado del sarcasmo al escribir "que nadie se preocupe mucho, que allí estará Salvador Illa para acudir al rescate, lo estaba deseando".
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