En un comunicado oficial, la patronal española CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales), ha expresado su rechazo a las "declaraciones por parte de algunos actores políticos e, incluso, de miembros del Gobierno", en referencia a las duras críticas vertidas por la ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Blearra.
Los empresarios creen que estas declaraciones "vienen a cuestionar el papel del empresariado con una agresión directa a la que se ha llegado a poner nombre propio". La CEOE recuerda que la Constitución española, en su artículo 38, ampara "la libertad de empresa en el marco de la economía de mercado y exige a los poderes públicos necesaria garantía y protección en su ejercicio". Por eso denuncia que es "incompatible el desconocimiento de estos mínimos principios con el ejercicio de un cargo en un poder del Estado".
La CEOE cree que en "estos momentos complicados", lo que necesita España no son "consignas" sino "reformas", y que los ataques a los empresarios "afectan a la convivencia, a la estabilidad del país y la confianza".
Por todo ello, la nota oficial de la patronal "condena y lamenta profundamente la injusta estrategia de desprestigio y descalificación que están sufriendo las empresarias y empresarios españoles", añadiendo que, "curiosamente", esto se produce en el arranque de un "año electoral".
Referencias a Podemos
Es más, la CEOE considera que estos ataques suponen "un grave error" por responsabilizarlos de "determinados problemas económicos", y cree que es "una estrategia peligrosísima de claro corte populista".
Los empresarios reprochan que hace falta que "determinadas fuerzas dentro del Gobierno", en clara alusión a Podemos, "se comprometan con la gestión de los problemas más importantes que arrastra la economía española y centren sus esfuerzos, como hacemos las empresas".
Por último, defienden que "las empresas son el motor de la economía, las generadoras de actividad, de empleo y, de este modo, de recursos para el sector público, que este después gestiona y distribuye en busca del bien general".
Piden por todo lo denunciado que "los empresarios españoles merecen un respeto, lejos de las difamaciones a las que estamos asistiendo", pero tienen una mano, dicen, para superar estos roces: "Una vez más, tendemos nuestra mano para dejar a un lado la crispación, que algunos parece que están buscando, y afrontar el momento actual desde la moderación y el espíritu constructivo".
Ataques concretos
Recientemente también hizo frente a Belarra el principal afectado, el presidente de Mercadona, Juan Roig, quien fue citado expresamente por la ministra morada a la hora de criticar a los empresarios. La política había tachado de "capitalismo despiadado" las ganancias del dueño de Mercadona, y culpaba a este tipo de grandes empresas de enriquecerse con la inflación.
Roig explicó que cualquier empresario debe estar "orgulloso" de serlo porque son ellos los que generan “riqueza y bienestar” en la sociedad y al mismo tiempo contribuyen a crear empleo.
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