Un posible adelanto de lo que pasará en las relaciones PP-Vox a nivel nacional: en Ceuta los 'populares' llaman "racistas" y "fascistas" a sus 'socios'

Lo que ha sucedido este jueves en una sesión plenaria de la Asamblea de Ceuta podría ser un adelanto y un presagio de lo que pasará en las relaciones PP-Vox a nivel nacional, después de confirmarse que Ciudadanos desaparecerá en los próximos años, y que el PP tendrá que sostenerse en los ultras para gobernar en autonomías y aspira a hacerlo para acceder al Gobierno central.

En Ceuta, el PP ha llegado a llamar "fascista" y "racista" al representante de Vox, Carlos Verdejo, a quien también calificaron de "sinvergüenza".

Verdejo había mostrado antes una actitud considerada "racista" hacia Fatima Hamed, la representante de Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC), y de confesión musulmana. "Nunca más usted va a tener una diputada en Madrid como tenemos nosotros y una senadora en Madrid como tenemos nosotros. Si acaso, la tendrá en el reino de Marruecos y no de España", le dijo Verdejo.

Verdejo también cargó contra el presidente-alcalde de Ceuta, Juan Vivas, un veterano del PP muy querido por el pueblo ceutí: "Me parece una vergüenza que usted no llamara para ver qué podía hacer por Ceuta", le reprochó sobre la reciente crisis migratoria ocasionada por Marruecos.

Pero quien estalló en el PP fue finalmente Yamal Dris, consejero de Medio Ambiente, quien cargó contra el portavoz de Vox: "Usted es un sinvergüenza y un racista". "Con este tipo de gente no se puede, es un fascista", añadió.

Esto es Vox.
Se suspende el Pleno de la Asamblea de Ceuta por un comentario del portavoz del partido fascista a la portavoz y diputada del Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía, Fátima Hamed.

El PP le ha dicho al de Vox:

"Es un sinvergüenza y un racista. Usted, Abascal..." pic.twitter.com/QVmTIYtWAn

— Juan Miguel Garrido (@Juanmi_News) May 27, 2021

De hecho, Jesús Vivas ha valorado positivamente la gestión en la crisis del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la crisis de Ceuta.

Lo que está por venir

Malas señales para lo que está por venir en un futuro. Si bien en sus inicios Santiago Abascal y Pablo Casado mantenían buenas relaciones y pactaron la famosa 'foto de Colón', después llegaron poco a poco algunos encontronazos.

Hubo muchas dificultades para lograr un apoyo en Andalucía al gobierno de coalición de PP y Ciudadanos, y hoy por hoy continúan las desavenencias. Por ejemplo, ayer mismo Vox tumbaba la nueva ley del suelo de Andalucía con su abstención, y se niega a que esta comunidad reciba a menores no acompañados (menas) procedentes del último episodio migratorio.

Sin embargo, próximamente habrá otra prueba de fuego en Madrid, donde Isabel Díaz Ayuso tendrá que ver sostenido su gobierno regional con los únicos apoyos parlamentarios de Vox aparte de los propios.

En caso de que Pablo Casado gane las elecciones generales en 2023, ocurrirá más de lo mismo: tendrá que echar mano de los diputados de Vox, a los que les negó su voto en la moción de censura contra Pedro Sánchez en 2020. Desde entonces, ambos no se hablan.