Los principios de ZP

El presidente Rodríguez Zapatero ha enumerado desde Vitoria los principios que cree esenciales para el futuro del País Vasco. Son estos cinco: para hablar de paz hay que olvidar la violencia; para concurrir a las elecciones hay que respetar la ley de partidos; el futuro de Euskadi requiere un acuerdo plural entre partidos; el PSOE apostará por ese acuerdo, pero no dará un paso adelante mientras persista la violencia, y el Gobierno mantiene intacta su determinación de lograr la paz.

Dos consideraciones: una, son principios tan obvios que no aportan nada nuevo, y dos, si como él mismo dice es necesario un acuerdo plural, ¿qué sentido tiene que tome la iniciativa quien, por otro lado, renuncia a dar un paso adelante? Este tipo de declaraciones, o bien pretenden marcar el paso o bien tratan de tender puentes a otras fuerzas políticas, sobre la base de posiciones previamente concertadas. Dada su inconsistencia, no parece que sea lo primero, por lo que habría que pensar más bien en el segundo escenario y aguardar a que muevan ficha PNV y Batasuna.

Sea lo que sea, Zapatero sigue mostrándose como una persona con buenas intenciones, incapaz de asumir que la vida política es mucho más complicada que todo eso, de ahí que estas declaraciones naif corren el riesgo de quedarse en nada. El presidente no acaba de afrontar los problemas que suponen la ruptura con el PP y su incapacidad  para convencer a Arnaldo Otegi. En realidad, la ausencia de un mínimo consenso con el PP y la ilusión de que es posible construir la paz sin cambiar nada condicionan esas buenas intenciones del presidente, mientras Rajoy le da caña, ETA sigue como siempre y Otegi no se pasa, definitivamente, al campo de la política.