Las elecciones europeas de 2009 han cobrado una especial relevancia debido a tres factores: el crónico desinterés de la opinión pública hacia los temas europeos; el desconocimiento generalizado de la sociedad respecto a estos asuntos; y en especial el hecho de que nos encontramos ahora en una coyuntura muy difícil debido a la crisis económica que afecta a todos y también a las incertidumbres que sobre la marcha de la Unión Europea (UE) plantea el bloqueo del Tratado de Lisboa, diseñado para engrasar el funcionamiento de las instituciones comunitarias.
Además llegamos a estas elecciones con la referencia de un nivel de abstención elevadísimo en las últimas elecciones europeas de 2004, que fue especialmente preocupante en algunos países del Este de Europa recién llegados a la UE. En el Partido Popular Europeo (PPE) disponemos de estadísticas, que por primera vez desvelo, que revelan que aproximadamente el 90% de los ciudadanos desconoce que el próximo año haya unas elecciones europeas.
Para cambiar esta inercia de desconocimiento - desinterés, y conseguir ilusionar y hacer participar al ciudadano los políticos que trabajamos en los asuntos europeos debemos redoblar los esfuerzos para explicar cuál es la razón de ser de la UE y cuál es su impacto positivo en su vida cotidiana.
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En este sentido, la difícil coyuntura económica puede ser una oportunidad para explicar que la UE es útil para afrontar mejor, de manera conjunta, una crisis económica que sería mucho peor y más difícil de afrontar si no tuviéramos una moneda común como el euro y una serie de políticas económicas coordinadas en todos los Estados de la UE.
La prueba de esto es que países como Islandia, que hasta ahora habían rehusado entrar en la UE, se están planteando hacerlo porque perciben sus efectos positivos en estos momentos difíciles.
La intención del Partido Popular Europeo (PPE), que cuenta actualmente con el mayor grupo político en el Parlamento Europeo y al que pertenecen el mayor número de Primeros Ministros de los países de la UE y la mayor parte de miembros de la Comisión Europea, es hacer hincapié en los asuntos que nos preocupan a todos.
A diferencia de otros, nosotros no rehuimos nuestras responsabilidades cuando estamos en el Gobierno, y lo estamos demostrando ahora que desempeñamos un papel clave en las instituciones europeas.
Por eso y aparte de la obvia mención a la economía –sin duda el asunto más urgente en estos momentos-, el programa electoral en el que ya estamos trabajando incluirá propuestas en asuntos que nos tocan a diario como la seguridad; el envejecimiento de nuestra sociedad y su relación con las prestaciones sociales; la integración de los inmigrantes; o la lucha por preservar nuestro entorno medioambiental.
El programa político del PPE intentará así dar respuesta a las preocupaciones cotidianas de los ciudadanos. Si lo conseguimos, y estoy seguro de que lo haremos, habremos demostrado que
“Europa” o la “
Unión Europea” no son sólo las instituciones de Bruselas sino que somos todos y que por tanto todos podemos involucrarnos en el proyecto europeo, que es positivo para el interés general e individual.
A veces se critica, en parte con razón, que las instituciones europeas son lejanas, inaccesibles y difíciles de entender para el ciudadano. Por eso es importante recordar que el Parlamento Europeo es la única institución europea cuyos miembros son elegidos directamente por los ciudadanos de los 27 países miembros de la UE.
Se trata de la manera más directa y clara de influir en la marcha de la Unión, por eso no debemos desaprovechar la oportunidad que tenemos en junio de 2009.
*Antonio Lopez-Isturiz es eurodiputado del PP y Secretario General del Partido Popular Europeo.
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