Corso de Corsos

El Carnaval cochabambino, que se identifica por mostrar la unidad en la diferencia cultural, contará este año con la presencia de 12 fraternidades del interior del país.
Como todas las gestiones, la apertura del Corso de Corsos estará a cargo de autoridades de la Alcaldía y a ellas les seguirá uno de los platos más fuertes de la Entrada, los números de las unidades militares que prometen ser todo un espectáculo por su creatividad y entusiasmo.
El recorrido comienza en el parque La Torre y continúa por las avenidas Heroínas, San Martín, paseo de El Prado y la avenida Ramón Rivero.
Otra de las características del Corso también es el juego con agua, que está permitido entre los espectadores. Sin embargo, las autoridades municipales han prohibido el juego con los participantes y bailarines que hagan su ingreso, debido al respeto que se debe tener con los mismos, por los costosos trajes que estos llevan y a fin de evitar los accidentes que se pueden ocasionar.

Ausencia del palco oficial
A consecuencia de los luctuosos sucesos ocurridos el mes de enero en Cochabamba, la Alcaldía de Cercado tomó la determinación de no implementar un palco oficial en el Corso.
El oficial superior de Cultura, Jorge Claros, indicó que con esta acción se pretende manifestar a la población el luto por los dos caídos en los enfrentamientos del mes pasado. No obstante, confirmó la presencia de las autoridades municipales en la Entrada.
En las últimas horas trascendió que el presidente de la República, Evo Morales y el prefecto del departamento, Manfred Reyes Villa podrían también estar presentes en la actividad carnavalera, en el palco militar que será instalado en la avenida Ballivián; no obstante, tal versión no fue confirmada.
En vez de palco oficial, este año los bailarines mostrarán sus mejores coreografías en el palco del jurado calificador, que estará ubicado en la avenida Ramón Rivero, dando crédito al desempeño de cada uno de los participantes.
Así, personas especializadas y relacionadas con el folklore, como antropólogos, comunicadores sociales y representantes de instituciones de danza, calificarán a quienes hagan su paso por este lugar.
Los premios a los ganadores de las distintas categorías serán entregados en efectivo la próxima semana.

Baches
Sin duda, el problema de los baches (trechos largos sin bailarines) en el Entrada del Corso de Corsos, quita el brillo respectivo a esta fiesta. Y, aunque desde hace tres años se ha puesto en marcha un mecanismo de operaciones para resolver el problema, la situación no ha cambiado mucho. En esta oportunidad, el mismo mecanismo, denominado “Jaladores movibles”, funcionará con un gran número de gente, para evitar la distancia entre una y otra fraternidad, y así dar fluidez a la entrada de los grupos. De este modo, las fraternidades que se detengan durante el recorrido y eviten la continuidad del Corso estarán sujetas a no participar en la Entrada de 2008.

Bebidas alcohólicas
Tomando en cuenta que el excesivo consumo de bebidas alcohólicas empaña este tipo de festividades, la Alcaldía determinó la prohibición de la venta ambulante de cerveza y otras bebidas en todo el recorrido del Corso y a 150 metros del mismo, por lo que las personas que sean sorprendidas comercializando este tipo de productos serán detenidas. Sin embargo, el consumo de bebidas alcoholizadas no está prohibido, pero la gente tendrá que tomar sus previsiones para poder adquirirlas.

Medidas de seguridad
Sumando todos los esfuerzos orientados a la prevención de cualquier acto que vaya a desmerecer la seguridad del Corso, la Policía del departamento y el Ejército han coordinado con todas sus unidades el empleo de más de 1.500 efectivos, que serán desplazados en el trayecto de la Entrada y las zonas adyacentes que serán resguardadas por patrullas.
El jefe de Operaciones del Comando de la Policía, Tcnel. Henry Terrazas, indicó que igualmente se contará con el sistema de control a través de cámaras, denominado “El Ojo Vivo” (proyecto impulsado por la Prefectura), que será un nuevo mecanismo de control que permitirá realizar ajustes a la seguridad y fortalecer los puntos donde se requiera de más refuerzo policial.
En ese sentido, las cámaras tendrán la misión de registrar todos los hechos que acontezcan en el Corso de Corsos y otras áreas de la ciudad.
Por otra parte, la autoridad policial aseguró que el trabajo de su institución será intensificado en horas de la madrugada, a objeto de evitar las riñas callejeras, peleas, actos de violencia, conductores ebrios y cualquier evento violento que pudiera ocurrir posterior a la Entrada.
Para resguardar la seguridad, la salud y la integridad física de los asistentes al Corso, también se harán presentes grupos de ayuda como el SAR Bolivia, institución que ha puesto a disposición 200 voluntarios y cinco carpas que estarán ubicadas desde el principio hasta el final del recorrido.
Sus tareas serán las de colaborar con la atención médica, estar listos para una probable evacuación de la gente y el control de venta de bebidas alcohólicas. Por otro lado, la Cruz Roja Boliviana también colaborará con 30 voluntarios entre médicos y paramédicos que estarán ubicados en dos carpas.