El portero del Sporting de Gijón, Iván Cuéllar, pasó en la tarde de este lunes por el quirófano después de que las pruebas médicas a las que se sometió por la mañana confirmaran los peores presagios, en forma de fractura en su tobillo derecho, que le mantendrá fuera de los terrenos de juego entre 3 y 4 meses.
El joven guardameta, según reveló el estudio radiológico al que fue sometido a primera hora de la mañana, sufre "una fractura, tipo B, del tobillo derecho", que necesitó cirugía para ser corregida. La operación fue llevada a cabo por el doctor Maestro, jefe de los servicios médicos del club, en el Hospital de Begoña.
Tras la misma, se calcula que el ex gurdameta del Atlético de Madrid estará de baja entre tres y cuatro meses. Tras el choque sufrido en la segunda mitad con Carlos Gurpegi, Iván Cuéllar regresó al término del partido desde Bilbao a Gijón en el autocar del equipo con un vendaje de inmovilización en la zona afectada.
Por su parte, el futbolista del Athletic Carlos Gurpegi, que tras el choque tuvo una pérdida momentánea de conocimiento, abandonó por la tarde la Clínica San Sebastián de la capital vizcaína, tras haber sido operado de una fractura en los huesos propios de la nariz, aunque se perderá como mínimo el partido de la próxima jornada ante el Real Betis.
Por ello, tras el entrenamiento matinal del Athletic, compareció en rueda el jefe de los servicios médicos del Athletic Josean Lekue, que explicó que tras la llegada al centro hospitalario "se le hizo un escáner que descartó que tuviera cualquier afectación cerebral" como consecuencia del traumatismo.
Además, aseguró que el futbolista navarro ha pasado "una buena noche" tras la intervención quirúrgica, y, que si toda transcurre según lo previsto, podrá volver a su casa de inmediato para recuperarse, aunque su regreso a la competición no se produciría hasta el año próximo.