La Asamblea examinará el viernes las explicaciones de Granados sobre el espionaje

La comparecencia la aprobaron este lunes el PP y el PSOE en la Diputación Permanente de la Cámara regional. Con ella, Granados comparecía no convocado por la oposición como esta buscaba y en un pleno extraordinario, sino a petición propia y en sesión de la comisión de Interior.

Izquierda Unida se abstuvo en la votación al considerar que Granados sólo desgranaría el organigrama de su departamento y se limitaría a recitar el grueso de sus competencias -ya explicó mediante fotografías que los hombres a quienes se acusaba de ser espías eran personal de seguridad-, pero la expectación por la sesión y la dureza de las comparecencias se multiplicará después de que el juez José Sierra haya visto indicios de delito y haya ordenado investigar los supuestos seguimientos a altos cargos políticos.

Aguirre: no tenemos espías
Antes de conocer la decisión, Gobierno y oposición se habían enfrentado duramente en el seno de la Diputación Permanente. La portavoz del PSOE en la Asamblea, Maru Menéndez daba por hecho que sus rivales populares estaban en un "todos contra todos, se espían y se vigilan", mientras que su homóloga en IU, Inés Sabanés, recalcaba que Francisco Granados era el responsable político de la trama "por acción u omisión", tanto si sabía lo que pasaba, y por tanto dirigía las operaciones, como si las desconocía y escaparon a su control. Por ello, pedía públicamente su cese inmediato.

El auto judicial que ordenaba investigar la trama llegó después de que, por la mañana, Esperanza Aguirre reiterar en Bilbao que su Ejecutivo "no tiene espías" a su cargo. David Pérez, portavoz del PP en la Asamblea, no dejaba sola a la jefa del Gobierno regional y acusaba a la oposición y al diario 'El País' de "venir a verter acusaciones de las que no tienen pruebas".

Dossier sobre Granados
Respecto al último capítulo de la trama publicada por 'El País', en el que se asegura que el anterior responsable de Seguridad de la Ciudad de la Justicia tendría en su poder un dossier comprometedor, encargado supuestamente por Alfredo Prada, sobre Francisco Granados, el propio Juan Carlos Fernández -a quien se robó un ordenador de su despacho- negó este lunes tener dicho documento o que en su día se le hubiese encargado el mismo.