La Fiscalía de La Paz detuvo hoy al ex presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) Santos Ramírez, después de que este declarara en la investigación sobre un caso de corrupción en la empresa.
El fiscal Edward Mollinedo confirmó hoy de forma escueta a los medios de comunicación que Ramírez queda detenido en la Fiscalía y será trasladado en las próximas horas a celdas policiales.
Ramírez, que fue destituido hace pocos días por el presidente Evo Morales, es investigado por la Fiscalía y el Senado por un escándalo de corrupción que estalló a fines de enero con el asesinato de un empresario boliviano que firmó contratos con YPFB.
Jorge O'Connor D'Arlach, ejecutivo de la empresa Catler Uniservice, participada por socios argentinos, fue asesinado cuando entraba con 450.000 dólares en efectivo a la casa de los familiares de la esposa de Ramírez.
Las oposición ha señalado que el dinero que transportaba O'Connor era para pagar una comisión ilegal a Ramírez por la adjudicación del contrato por construir una planta de gas por 86 millones de dólares.
Ramírez es investigado por posibles daños causados al Estado con ese contrato suscrito el año pasado y la presunta corrupción. Ramírez, que también fue presidente del Senado en 2006, era uno de los hombres más fuertes del Gobierno de Evo Morales, quien ha respaldado las investigaciones de la Fiscalía y de una comisión de senadores hasta dar con los responsables de la corrupción.
El ex presidente de YPFB debe comparecer mañana a una audiencia judicial de medidas cautelares que definirá su situación, tras su detención en la Fiscalía.
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