Panistas aceptan que haya cambios para la iniciativa de ley de extinción de dominio

Pese a la confrontación entre las dirigencias del PRI y del PAN en el Senado de la República ambos partidos buscan alcanzar los acuerdos respecto a la ley de extinción de dominio, ya que los legisladores del blanquiazul flexibilizaron su postura inicial y ya aceptaron que se modifique la iniciativa presidencial.

El priísta Jesús Murillo Karam, titular de la Comisión de Gobernación  informó que presentaron una serie de observaciones al proyecto de Felipe Calderón, con el fin de que se agilicen los mecanismos para que el Estado pueda apropiarse de los bienes de la delincuencia organizada, pero poniendo a salvo los derechos de terceros inocentes.

Si se alcanza un acuerdo, el dictamen podría aprobarse en comisiones la semana próxima. Las negociaciones se habían interrumpido porque la bancada blanquiazul no aceptaba ningún cambio a la ley de extinción de dominio, propuesta por Calderón. Ayer, sin embargo, el senador Felipe González confirmó que discuten las adecuaciones necesarias, con el propósito de que no se vulneren los derechos fundamentales de los mexicanos, ya que el PAN en forma alguna pretende que para castigar a los malos se perjudique también a los buenos.

El senador Murillo Karam, a su vez, explicó que las modificaciones que los priístas plantean van en el sentido de que se salvaguarden los derechos de aquellas personas que, por ejemplo, hubieran rentado un inmueble que se usó después para un ilícito sin que estuvieran enteradas.

En este sentido se propone salvaguardar los derechos de terceros inocentes, con un proceso que les permita defenderse correctamente cuando tengan razón. Asimismo, que se establezca como obligación del Ministerio Público probar la mala fe de terceros inocentes y que la posibilidad de iniciar una extinción de dominio implique la existencia del cuerpo del delito.

De otra forma, bastaría con que alguien formulara una acusación para que se extinga el dominio sobre algún bien. Si se aceptan esas modificaciones, subrayó, creo que estaríamos del otro lado. Insistió en que su bancada ha probado con hechos su disposición a proporcionar al Ejecutivo las herramientas jurídicas necesarias para enfrentar mejor al crimen organizado, pero sin que se instaure un Estado policíaco que no respete los derechos humanos.

Por su lado el senador Felipe González, presidente de la Comisión de Seguridad Pública, expresó que confían en que la próxima semana se podrá aprobar en comisiones dicha ley, con las observaciones de todos los partidos, con el fin de que sirva para golpear la estructura financiera del narcotráfico y de otros delincuentes, y de que no perjudique a ciudadanos inocentes.

Cabe destacar que otra reforma sin dictaminar de las que envió el presidente  Calderón y el dirigente nacional del PAN, Germán Martínez, ha acusado al PRI de “no colaborar en la estrategia de combate a la delincuencia organizada”, es a la que se refiere al narcomenudeo. Sobre ésta aún no hay avance se afirma en medios allegados al Senado de la República, bien informados, pues los senadores priístas y los perredistas no están de acuerdo en que se penalice el consumo de drogas, como propone la iniciativa presidencial.