www.diariocritico.com
El desgaste de Zapatero

El desgaste de Zapatero

jueves 18 de febrero de 2010, 19:03h

Es un hecho comprobado que el poder desgasta; sobretodo en los sistemas democráticos donde las cualidades de convencimiento del gobernante sustituyen a la imposición autoritaria. Por supuesto que en unos, la erosión se nota más rápido que en otros.

 Zapatero en España, es un ejemplo de ello, luce harto de todo, cansado. Un rictus de hastió se apodera de él cada vez que habla. Es un hecho que un tercer mandato es ahora mismo inalcanzable, a pesar de las facilidades que ofrecen Rajoy y el PP. Emular y sobrepasar a Felipe González siempre fue un imposible, pero principalmente ahora, cuando España hace agua por los cuatro costados y las criticas internacionales contra Zapatero, en momentos en que le toca encargarse de la presidencia de la UE, no cesan, cercándolo y exasperándolo aun más.

No es en nada descabellado, afirmar que Zapatero ha venido viviendo de la renta y no me refiero simplemente a la renta europea con la que España ha tenido que compensar su desventaja económico-monetaria para poder ser miembro de la UE, esa misma que tiene a Grecia, ahora mismo, con un pie adentro y otro afuera de dicho club europeo, no obstante el padrinazgo financiero de Alemania, uno de los socios fundadores. Me refiero igualmente, a esa renta con la que no se contaba antes de los funestos sucesos del 11M del 2004 y que, en lo político, se tradujo en una victoria electoral tres días mas tarde.

Más por la falta de carisma de Rajoy, que por otra razón, la popularidad de Zapatero fue ratificada en el 2009, lo que llevó a decir a Sarkozy que sin ser  muy inteligente, Zapatero era capaz de ganar elecciones. Y aunque al presidente galo no le parezca tan  listo, hay que reconocer el talante de Zapatero  para recriminarle al PP, durante los seis años que lleva como presidente, las políticas y ejecutorias del gobierno de Aznar, es decir, como si el PSOE aun fuese un partido en la oposición y no el responsable del gobierno, o pedirle a Rajoy cada vez que éste hace uso de su derecho a criticar alguna medida como líder de la oposición, que tenga una actitud mas seria y responsable, acusándolo de crispación y pidiéndole, incluso, pactos y soluciones. Cinismo, populismo de la misma calaña del que en Venezuela le ha permitido a Chávez durante estos once años echarle la culpa de todo lo que el no hace o no puede hacer, a los gobiernos predecesores; en todo caso, tácticas lamentablemente efectivas ante el electorado.

Resulta, por lo mismo, una tarea no exenta de dificultades, señalar cuales son los éxitos tangibles del gobierno socialista del señor Zapatero, tanto en política nacional como internacional. Sus políticas económicas, si se les puede calificar así, son verdaderos brotes silvestres, tan espontáneas en sus consecuencias como lo pueden ser los resultados provenientes de la falta de planificación de un gobierno que pasó sus primeros cuatro años tomando conciencia de lo que ocurría, mientras improvisaba medidas para atender el día a día.  Y en cuanto a sus políticas sociales en las que destaca el matrimonio entre personas del mismo sexo, la ley contra la violencia de género, o  la ley de la Dependencia con ayudas para familias con personas dependientes a su cargo, no creo que constituyan por si mismas una obra de envergadura como para destacar entre el tumulto de la historia, sin embargo se trata de minorías que suman algunos votos y que contrastan con las peligrosas licencias concedidas en lo que respecta al problema de ETA o al estatuto de autonomía catalán, otras minorías que en realidad tocan a las mayorías. Fracaso que luce aún más estrepitoso en el ámbito  internacional con los abiertos apoyos, hoy en día sin atenuantes, al régimen de Chávez y al gobierno en el exilio de Zelaya durante todo el conflicto hondureño, lo que refleja la falta de rumbo y de destino en el papel que debe jugar España en Hispanoamérica, en momentos en que se celebra el bicentenario de su independencia. Y nada se diga en Europa, donde las criticas le han llovido a Zapatero de un tiempo a esta parte, o en el resto del mundo, donde sobresale el estado de las pésimas relaciones que su gobierno ha mantenido con el norteamericano; lo que explica quizás el plantón que le dio Obama  hace unos días, o el inusitado interés que el canciller Moratinos pone, para que España reciba a cinco presos desde Guantánamo.

A Zapatero en España, como a Chávez en Venezuela, el desgaste se les ve en la cara desde hace tiempo.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios