Zarrías, que participó en la Comisión General de las Comunidades Autónomas que se ha celebrado en el Senado, manifestó que ese sosegamiento viene dado por dos aspectos: por una parte el texto que llega al Senado significa que "podemos hacer una reforma ambiciosa, de gran calado, elevando sensiblemente el nivel de autogobierno, es decir, construyendo Estado, fortaleciendo su estructura cooperativa y su cohesión solidaria".
Y por otra parte, dijo el consejero, esta reforma "serena las aguas por lo que lleva implícito de que España no se rompe porque ahondemos en la lógica de descentralización política prevista en la Constitución".
La Comisión General de las Comunidades Autónomas se celebró en el antiguo salón de sesiones del Senado y es el órgano que designará a los integrantes de la ponencia conjunta sobre la propuesta de reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía.
El consejero apuntó en su intervención que el texto era "leal" a España, porque se ha elaborado teniendo en mente una visión global e integradora del Estado, una visión que resumió en seis principios que han servido de guía para su realización.
En primer lugar, la unidad de España, que se asienta en la soberanía única representada en las Cortes Generales. En segundo lugar, la igualdad en las posibilidades de autogobierno de las Comunidades Autónomas. En tercer lugar, el reconocimiento de la pluralidad cultural y la diversidad de identidades de las nacionalidades y regiones. En cuarto lugar, el principio de ciudadanía: la igualdad de derechos de todos los ciudadanos españoles. En quinto lugar, la solidaridad entre territorios. Y en sexto lugar la cooperación y coordinación de las Comunidades Autónomas con el Estado.
Por todo ello, el consejero manifestó que el documento que se ha presentado en el Senado "es equilibrado en su arquitectura institucional; coherente con una visión integradora de las autonomías de España; exhaustivo en cuanto a los derechos de los ciudadanos; y riguroso en la exigencia de transparencia y control democrático de los poderes públicos".
Para el responsable de la Presidencia el armazón jurídico e institucional de la Autonomía andaluza "está estructurado por principios y valores que le dan sentido: los derechos individuales y el bienestar social de los ciudadanos; y los valores de igualdad, libertad y justicia".
Dijo también el consejero en su intervención que Andalucía fue la primera Comunidad en plantear la reforma de su Estatuto y también en abordar formalmente su debate en el Parlamento autonómico.
Aseguró igualmente que el Estatuto andaluz proyecta "la ambición de futuro de los andaluces; hemos pasado de luchar por nuestra dignidad a proyectar nuestra ambición. Y para esa ambición de futuro, el nuevo Estatuto fija los ejes fundamentales del nuevo modelo de desarrollo que ya estamos impulsando".
Por último, el consejero de la Presidencia manifestó que el texto andaluz aportaba equilibrio a la España de las Autonomías, sin dejar de proyectar la ambición de una Comunidad pujante, es decir, "un Estatuto fiel a Andalucía y leal con España".
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