Las Madres de Plaza de Mayo celebraron sus 30 años de lucha con un multitudinario acto

En su discurso, Bonafini defendió enérgicamente la política oficial de derechos humanos y recordó que "el presidente (Néstor Kirchner) ha dicho que nuestros hijos son sus compañeros".
 
Cuando desde la multitud surgieron aisladas expresiones reprobatorias ante la mención del primer mandatario, Bonafini afirmó que "los que silban no entienden nada".

"Este es un nuevo momento que vive nuestro país. Estamos orgullosas de construir para la revolución. Protesta con propuesta, decimos las Madres", enfatizó.

A tono con la consigna de la celebración, "¡Hasta la victoria siempre, queridos hijos!", la dirigente se dirigió idealmente a las víctimas de la dictadura y a la vez a las generaciones presentes porque "ellos están ahí, en cada uno de ustedes".

"Estamos convencidas de que están en la multitud. Nadie se va para siempre. Somos su voz, su mirada, su corazón, su aliento", subrayó.  

Bonafini recordó que durante 30 años, cada jueves a las 15.30, las Madres estuvieron en la Plaza de Mayo.

"Que ya es nuestra y también es de nuestro pueblo, de todo el pueblo que lucha, como los que están construyendo en la Villa 15, en Ciudad Oculta, en Los Piletones; el Perro Santillán, allá en Jujuy; los maestros del sur, de Salta; Pepino Fernández", dedicó.

La dirigente insistió con la línea de combinar convicciones con acción. "Hay mucho que hacer. Todavía hay hambre, desocupación y necesidad de viviendas", dijo.

La oradora saludó a una delegación de Padres de Cromañón, presente "con su solidaridad en la tristeza".

"Ellos dicen que no pueden hacer un recital. No entienden esto de disfrutar", comentó.

"Nosotros sí porque vencimos a la muerte, queridos hijos. Vencimos al verdugo. Esto es vida pura, llena de amor y de abrazos", enfatizó.

Afirmó que "con esos hijos que nos nacieron después, estamos sembrando un nuevo camino, que no deja de ser revolucionario, construyendo, marchando junto a quienes nos necesitan".

"Queridos hijos. Su sangre no fue inútil, florece en cada barrio, en cada lugar donde hombres y mujeres levantan su puño por trabajo digno, por vivienda", remarcó.

Expresó luego que, a diferencia de las Madres que tienen entre 80 y 94 años, "ustedes seguro vivirán y disfrutarán la victoria, que es nuestra".

Bonafini agradeció las adhesiones recibidas, en especial las de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del presidente cubano Fidel Castro, y se pronunció por "la unidad latinoamericana, indispensable para llegar al socialismo.

"¡Patria o muerte! ¡Venceremos", proclamó al final la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo.