Ahí está la sombra del posible pacto que comentábamos. Un acuerdo entre Gobierno y principal partido de la oposición, el PP, para tener un hombre de consenso al frente de la CECA. Y ese hombre es
Isidre Fainé, presidente de La Caixa y por ahora vicepresidente de la confederación.
Fainé contaría con el apoyo de
Rodrigo Rato, el flamante presidente de Caja Madrid, y hombre fuerte del PP en el consejo, además del visto bueno de los socialistas. Todo lo contrario que el sector de
Quintás, hasta ayer presidente de las cajas y que se habría labrado una 'enemistad' de diversos sectores en estos años de gestión. El retraso en afrontar reformas en el sistema de cajas ha sido su condena final.
Por eso fue totalmente descartado
Amado Franco, a quien Quintás proponía como nuevo presidente. La tensión fue enorme y tras una pausa en la junta, con el consabido aplazamiento de una decisión, el director general de la CECA,
José Antonio Olavarrieta, asume el poder ejecutivo de forma interina. Aunque esto se asume como un paso formal y oficiosamente es el propio Fainé, como vicepresidente, quien toma las riendas de las cajas de ahorro nacionales.
El 20 de abril, decisión definitiva
Así las cosas, el consejo de la CECA acordó posponer hasta el 20 de abril la elección del sustituto de Juan Ramón Quintás en lo que será un consejo monográfico. El dimisionario presidente compareció en rueda de prensa tras la reunión del máximo órgano de gobierno de la patronal y no sólo reconoció que "si hubiera existido unanimidad" sobre los candidatos a sucederle se hubiera elegido ya y no habría habido que esperar, "pero no ha sido el caso".
El ya ex presidente de CECA no quiso desvelar el número de candidaturas presentadas hasta el momento, pero aseguró que "no le preocupa que se presenten dos, tres o cinco". Precisó al respecto que "incluso se valoró establecer una fecha de cierre de presentación de candidaturas, pero se descartó y se ha dejado abierto de forma que "se pueden presentar hasta el último día".
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