La muestra podrá visitarse hasta el 30 de mayos en la Sala de Exposiciones de la Fundación en Santander y en ella se podrán ver unas 70 ilustraciones de las casi 500 que se han catalogado. La mitad de ellos son inéditos, procedentes de colecciones privadas e incluso de la casa de sus descendientes, de donde "nunca" habían salido.
La exposición se divide en cuatro apartados: los dibujos al natural de lugares como las calles de Barcelona, los trabajos relacionados con sus esculturas, los pictóricos y los retratos y autorretratos, y reune por primera vez los tres bocetos que hizo de su obra 'El profeta', que concibió, según revelan las fechas de las ilustraciones, años antes de lograr esculpirla.
La comisaria, María José Salazar, describió que con sus dibujos Gargallo "sabe transmitir el interior" de sus protagonistas, de forma que logra "delatar" y "extraer" la personalidad y "psicología" de los personajes retratados.
La mujer ocupa un papel "central" en su obra, al igual que la música como instrumento de creación, y los aspectos autobiográficos.
Los dibujos recopilados se hicieron entre los años 1885 --desde muy pequeño-- y 1934, pero existe un período en el que se detecta una falta de actividad, porque algunos fueron destruidos o perdidos, De hecho, parte llegaron a ser quemados por una de las criadas de la familia, al considerar que era un "papel viejo" que servía para que el fuego de la chimenea "ardiera mejor".
El nieto del pintor y escultor, Jean Anguera Gargallo, elogió la "calidad" de la exposición y lo "poco habitual" de que se exhiban dibujos, por tratarse de obras "dispersas" y "frágiles".
El descendiente de Gargallo expresó que para su abuelo, el dibujo "equivalía a la libertad". Así, la mayoría de ellos los hizo cuando era joven y trabaja a sueldo de otros escultores, en una época en la que usó esta otra técnica para "expresar lo que quería con libertad".
Fue en el año 1907 cuando Gargallo empleó la chapa metálica para una escultura. Era algo que "no se había hecho nunca" y que abrió caminos a la escultura moderna, remarcó la comisaria de la exposición. Su obra escultórica se caracteriza además por el uso del "vacío" como elemento que transmite significado, trazando movimientos a base de líneas
Pablo Gargallo nace en 1881, el mismo año que María Blanchard y Pablo Picasso, que fue su amigo, con quien viviría en París y a quien vio pintar 'Las señoritas de Avignon'. A los pocos meses, fue cuando hizo una máscara con chapa metálica y "abrió el camino a la escultura moderna"
El director de la Fundación, Íñigo Sáenz de Miera, subrayó que esta exposición es "una muestra más de la unidad" de la programación de esta institución, al enmarcarse en una "línea de investigación" sobre el papel del dibujo en el arte español y sus desconocidos autores.
El estudio de la obra sobre papel de Pablo Gargallo, que se remonta al año 2007 y que se plasmará en un catálogo, está dentro del proyecto 'Maestros del dibujo español' que la Fundación desarrolla bajo la dirección de Alfonso Pérez Sánchez.
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