www.diariocritico.com
Perú, primer productor mundial de cocaína

Perú, primer productor mundial de cocaína

lunes 07 de junio de 2010, 08:23h

Según el jefe de la policía colombiana, Oscar Naranjo, el Perú ya superó a Colombia en producción de cocaína, 380 toneladas al año frente a 295 de nuestros vecinos.

El Perú ya se había convertido en el primer exportador de cocaína, como se dijo en esta columna. (“Perú primer exportador de cocaína en el mundo”, 1.7.09)

Según Naranjo, Colombia producía 1,100 toneladas de cocaína en la década de 1990. Ahora, gracias a los esfuerzos de varios gobiernos, la producción se ha reducido a menos de la tercera parte.

Naranjo puso el dedo en la llaga: el “verdadero drama y el verdadero problema” de Perú es que sus autoridades sólo sacan del mercado al año 14 toneladas, mediante operaciones de decomiso. Mientras, resaltó Naranjo, las autoridades colombianas intervienen 203 toneladas, que es la cifra de 2008. Es decir, la policía colombiana decomisa 15 veces más cocaína que su par peruana.

Esta cifra “significa que nos hemos incautado de más del 50 por ciento de la droga que produce Colombia, versus unos índices muy bajos de incautación en otros países”. Una cachetada para sus colegas peruanos.

Algunos críticos de la llamada guerra contra las drogas sostienen que esta es un fracaso porque el narcotráfico sigue existiendo. Esa es una falacia. Es imposible acabar con el narcotráfico. Pero la situación se puede cambiar radicalmente como ha ocurrido en Colombia.

En la década de 1990 los grandes cárteles de Medellín (Pablo Escobar y otros) y Cali (los Rodríguez Orejuela y otros) controlaban departamentos enteros y desataron una ola de violencia brutal que convirtió al país en uno de los más inseguros del mundo.

Poco después se sumaron las FARC, que resucitaron gracias a su completo involucramiento en el narcotráfico y crearon un ejército de 15,000 efectivos, bien armados y equipados.

Hoy día eso ha cambiado radicalmente. La violencia ha disminuido sensiblemente, Colombia es mucho más segura que antes, los grandes cárteles han desaparecido y las FARC están reducidas a su mínima expresión.

El narcotráfico sigue existiendo, pero son bandas más pequeñas, con perfil más bajo y ejercen menos violencia.

Eso es un triunfo.

El objetivo no es acabar con el narcotráfico. Eso es imposible a menos que se despenalicen las drogas, como ha propuesto Mario Vargas Llosa y otras personas. El objetivo es contenerlo y reducirlo, como lo está logrando Colombia.

En el Perú seguimos el camino inverso. El narcotráfico está creciendo sin control, generando más corrupción y violencia. Cuando se le quiera enfrentar en serio, la lucha va a ser muy dura y sangrienta. Mientras más se le deja prosperar, más difícil y violento será combatirlo.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios