El secretario general de la tolda aurinegra, Tomás Guanipa, denunció que las recientes medidas contra el sector privado han afectados a más de 600 mil trabajadores.
En este sentido el presidente de la tolda verde, Roberto Enríquez, exige que el gobierno cese su política de amedrentamiento por considerar que las expropiaciones hechas por “capricho” vulneran derechos constitucionales y destruye el empleo.
Por su parte, el MAS exigió que se fomente un clima de confianza para la inversión privada.
El secretario general de Primero Justicia, Tomás Guanipa, dijo que el gobierno es responsable de que una importante masa laboral haya retrocedido en lo que respecta a reivindicaciones salariales.
Guanipa denunció que la mayoría de las empresas expropiadas por el Estado han tenido que bajar los sueldos de sus empleados porque según dijo han dejado de ser productivas. Asimismo, aseguró que el gobierno ha gastado 23 mil millones de dólares en comprar empresas que luego se van a la quiebra.
Por su parte, el presidente de Copei, Roberto Enríquez, señaló que “el gobierno debe acabar con las expropiaciones, creo que hay un mandato muy claro de la sociedad venezolana en contra de esta nefasta y terrible política de Estado que no es otra cosa sino buscar la destrucción de la economía, de la política nacional, la destrucción de la familia venezolana”.
El coordinador del MAS-Miranda, José Báez, anunció el inicio de una campaña casa por casa para motivar a los electores a participar en las elecciones parlamentarias de septiembre la cual tiene como objetivo llevar un mensaje incluyente y reconciliador a aquellos venezolanos considerados como ni-ni y defender la propiedad privada.
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