El socialista Francesc Antich quiere reeditar el tripartito

 Baleares es la segunda comunidad donde la Presidencia, ahora en manos del PP, está más en la cuerda floja –la primera es Navarra-. Siempre han sido unas islas difíciles, donde María Antonia Munar, de Unió Mallorquina, ha dispuesto de una pequeña pero importante llave para el Gobierno regional. Ahora, sin embargo, las espadas están más en alto que nunca, y según confiesan a Diariocrítico medios socialistas, cabe la posibilidad de que el PSOE pueda hacer en las islas algo similar al ‘tripartit’ catalán con el candidato del Bloc per Mallorca (PSM-Entesa+EU-V), Gabriel Barceló. Ésa es, precisamente, la apuesta seria del socialismo no sólo balear, sino nacional.

 Ya en mayo de 2003, el actual presidente, Jaume Matas, tuvo que esperar hasta las tres de la madrugada y arañar uno a uno los votos, pero el PP obtuvo mayoría absoluta y recuperó Baleares. Los 1.626 votos de la AIPF, -la versión del PP en la isla de Formentera- fueron decisivos para asegurar al ex ministro de Medio Ambiente un Gobierno sin necesidad de pactos.

 De todas formas, las elecciones siempre son muy reñidas en las islas. Por ejemplo, hace cuatro años, de 59 diputados, 29 fueron para el PP, pero 15 para el PSOE, 4 para PSM-Entesa Nacionalista (PSM-EN), 3 para Unió Mallorquina (UM), 2 para Esquerra Unida-Els Verds (EU-EV), 5 para Pacte progresista, y uno para la Agrupació Independient Popular de Formentera (AIPF).

 Ahora, la encuesta del CIS no le brinda ninguna seguridad a Matas para la reelección, ya que el PP perdería dos escaños esenciales y se vería abocado a gobernar con la siempre difícil María Antonia Munar. Ahora bien, tampoco el socialista Francesc Antich lo tiene claro, ni siquiera con el tripartit que ya aparece como apalabrado.

 La situación en Baleares es, sin duda, desquiciante, y hasta allí se han desplazado también los líderes nacionales del PP y del PSOE. Se da la circunstancia anecdótica de que Rajoy y Zapatero coincidieron el mismo día del ‘ecuador’ de la campaña –viernes 18- en las islas. El primero, con especial incidencia en Ibiza que, junto a Formentera, son las que van a decidir el futuro Gobierno.

Así de claro. Y, luego, efectivamente, en Palma de Mallorca, con mitin y descanso incluidos. Zapatero sólo visitó Palma, no quiso ir a Ibiza donde el escándalo de la supuesta corrupción socialista podría salpicarle, políticamente hablando.