Tres opciones sobre la sustitución de Corbacho

Las quinielas sobre quien podría ser el sustituto del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, que ya anda con un pie y parte del otro en Cataluña, siguen circulando por los mentideros políticos. A la  reconocida disposición a ocupar la cartera del eurodiputado Ramón Jáuregui – lo que, según algunos compañeros de partido, le ha perjudicado por ‘postularse’ pese a saber que a su favor juega la buena relación que mantiene con el PNV, partido que va a ser crucial para poder aprobar los Presupuestos Generales del Estado de 2011-, se unen más opciones.

Una de ellas es que ocupe el cargo Octavio Granado, secretario de Estado de la Seguridad Social, que sería el sustituto ‘natural’ de Corbacho en unos momentos tan complicados de la legislatura, con la huelga general a la vuelta de la esquina y la negociación de la reforma de las pensiones a punto de comenzar. 

Pero fuentes cercanas al presidente tampoco descartaban este miércoles rotundamente la posibilidad de que las competencias de Trabajo e Inmigración fueran absorbidas por otros ministerios, al menos hasta que Zapatero se decida a hacer una remodelación en toda la regla de su Gobierno. Hay quien apunta  a que sea Manuel Chaves, vicepresidente tercero del Gobierno, el que asuma esta responsabilidad, dada su experiencia. No hay que olvidar que el ex presidente de la Junta andaluza  fue titular de Trabajo en el Gobierno de Felipe González entre 1986 a 1990. Además, siempre ha mantenido muy buena sintonía con los sindicatos con los que  Zapatero quiere restaurar los puentes rotos para poder abordar en el mejor clima posible la citada reforma de las pensiones, que va a costar lo suyo al Gobierno cerrar un acuerdo.