La Comunidad ha sorteado 42 pisos del Plan Joven en el municipio

Los jóvenes agraciados, que acudieron este miércoles al centro cultural "Peñalba" para presenciar en directo el sorteo, podrán disfrutar de un piso de 70 metros cuadrados con una plaza de garaje, y pagarán una renta mensual de 410 euros. Además, podrán ejercer el derecho a compra transcurridos siete años por un precio final inferior a 120.000 euros.

En el sorteo participaron en total 1.143 personas menores de 35 años, que se hubieran inscrito en la lista única de la Oficina de Vivienda antes del 30 de septiembre de este año y estuvieran empadronados en Collado Villalba con una antigüedad de al menos tres años.

El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Mariano Zabía, quien estuvo presente en el sorteo, afirmó que el Plan Joven "está respondiendo a las necesidades de vivienda de los madrileños más jóvenes en todos los municipios de la región".

Por su parte, el alcalde de Collado Villalba, José Pablo González, destacó "el esfuerzo" que para el Gobierno municipal representa la construcción de viviendas de carácter protegido debido a "las reducidas dimensiones" territoriales de la localidad, de la que dos tercios están protegidos a causa de su riqueza medioambiental.

"Aunque tras acabar la carrera me sea difícil encontrar trabajo, por lo menos ya tengo piso", afirmó Israel Vadillo, un estudiante de Biología de 23 años, que se sintió tan afortunado tras conocer el resultado del sorteo que no era "capaz de creerlo".

Otro de los adjudicatarios fue Félix Ferreiro, un joven casado y con un bebé que, a diferencia de Israel, llevaba bastante tiempo esperando poder acceder a una vivienda puesto que, según relató, actualmente vive en casa de su madre donde "apenas hay sitio para la cuna del niño".

El sorteo, que se pudo seguir en directo a través de la web de la Comunidad, se desarrolló ante notario y mediante el sistema informático creado por los servicios informáticos de la Comunidad de Madrid (ICM) e INDRA en exclusiva para la Oficina de Vivienda regional. Una vez cerrada la lista de participantes en cada sorteo, el sistema informático asigna de manera aleatoria un número a cada participante.

Estos números, sin llevar el nombre del participante vinculado, giran en un "bombo virtual" puesto en marcha por un notario, dando como resultado una lista de adjudicatarios (42) y un cupo de reserva (15) previsto para los casos en que queden viviendas vacantes por renuncia o incumplimiento de los requisitos por parte de los adjudicatarios.