La pretendida Policia Autonómica

El flamante Consejero de Justicia, Manuel Campos, ha participado en los actos del patrón de la Policía Local de Cartagena, habiendo dedicado una conferencia a los asistentes en la que trató sobre la posible generación de la Policía Autonómica.

El consejero comentó la viabilidad jurídica de tal pretensión, en base a una interpretación de la coordinación de las Policías Locales, lo que de hecho el gobierno de Valcárcel ya ha utilizado para ayudar a los Ayuntamientos en un proceso selectivo realizado hace un tiempo para el acceso a dichos cuerpos, así como en la generación de una Academia Regional de Policía Local.

Realmente la coordinación en los ámbitos organizativos y de seguridad siempre son recomendables, por lo que nos parece loable toda acción de fomento, apoyo y armonización de los procedimientos selectivos, formativos, de promoción y carrera profesional de la Policía Local en nuestra Región. Pero no olvidemos que son cuerpos municipales, que en virtud de la autonomía municipal, reconocida por la vigente Constitución, han de regirse y gobernarse por los diferentes Entes Locales, de los que dependen, en los que realizan sus funciones, y de los que perciben sus retribuciones.

Por lo que ir más allá de esa coordinación regional, nos parece un tanto desajustado, salvo que Murcia consiga las correspondientes competencias en materia de seguridad pública, que le permitiera crear una Policía Autonómica a la usanza catalana o vasca, que posiblemente sea esa la pretensión última del Consejero, pero tal hecho determinaría la creación de un nuevo cuerpo funcionarial con su correspondiente partida presupuestaria, generación de instalaciones propias, vehículos y material al uso, con el consiguiente incremento del gasto presupuestario, que no nos parece sea el momento más adecuado si quiera para pensarlo y menos para plantearlo.

La Comunidad Autónoma en consonancia con las medidas de contención del gasto marcadas por la UE, lo primero que tendrá que hacer es reducir su déficit presupuestario, además de ponerse al día en los pagos a sus proveedores. De forma análoga a como tendrían que hacer también los Ayuntamientos, muchos de los cuales están en una mala situación económica.

Pero además, no parece que sea una necesidad socialmente sentida, pues no hay la menor petición popular de la creación de una Policía Autonómica, que vendría a redundar en sus funciones sobre las que ya tienen encomendadas la Policía Nacional y la Guardia Civil, cuyos efectivos en la Región últimamente han sido incrementados, y por cuyo servicio –asumido por el Estado- ya existen las correspondientes partidas con cargo a los Presupuestos del Estado, que es quien tiene la obligación de garantizarnos a los ciudadanos la seguridad.

Al tiempo que está por demostrar, la mayor eficacia contra la criminalidad por la existencia de un tercer cuerpo policial concurrente en el mismo territorio con otros dos nacionales.

EL MIRAVETE