Los dos meses de Clara López

Tras la sanción impuesta por el ministerio Público a Moreno, el presidente, Juan Manuel Santos, solicitó al partido de éste, PDA, una terna para poder elegir el remplazo del alcalde de Bogotá; y, temporalmente, encargó la ciudad a María Fernanda Campo, actual ministra de Educación. De acuerdo a lo anterior, el PDA inicialmente propuso a: Mariella Barragán Beltrán, secretaria de Desarrollo Económico de Bogotá; Jaime Moreno, integrante del Comité Nacional de Ética del Polo Democrático; y Tarcisio Mora, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT); no obstante, Barragán presentaba algunos impedimentos para conformar la terna, por lo que el PDA decidió incluir en su lugar a López, siendo ésta última la elegida por el propio Santos para desempeñar el cargo de manera temporal. De esta forma, el pasado viernes  de junio, López se posesionó en el cargo e inmediatamente dio su punto de vista sobre uno de los temas más espinosos que tocan por ahora a la Alcaldía de la capital: la venta de la Empresa Telefónica de Bogotá (ETB). Al respecto, López manifestó: "quiero expresar con claridad que comparto los principios expuestos por mi partido, en el sentido de que no apoyamos la privatización de los bienes distritales.  No apoyaré la privatización de la red hospitalaria de la ciudad, ni de la Universidad Distrital, ni mucho menos de una empresa que forma parte del patrimonio de los bogotanos como la ETB". De otro lado, López declaró que monitoreará personalmente cinco millonarias licitaciones (refrigerios, vigilancia y aseo en colegios, recaudo de pasajes y basuras y aseo). "Que ni se asomen a mi Gobierno", expresó la alcaldesa encargada, en relación con las mafias de la contratación que últimamente han permeado la política distrital, y son las responsables del atraso de las obras en Bogotá, la inseguridad, y la sanción a Samuel Moreno, entre otros. Noticias relacionadas... Bogotá espera 'suplente' del Alcalde Mayor