El proyecto de remodelación del Eje Prado-Recoletos tendrá que ser evaluado por la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura y Turismo, cuyo titular, Santiago Fisas, aseguró este martes que ve “difícil que haya muchos cambios en el Eje”, pues el decreto por el que fue nombrado Bien de Interés Cultural es “muy claro y taxativo” cuando protege las fuentes, los monumentos, los árboles y el trazado.
“Me alegro de que el alcalde haya estado abierto a posibles cambios del proyecto inicial por las peticiones de las instituciones que están en el Eje”, aseguró Fisas al ser preguntado en rueda de prensa por la decisión del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, de dar marcha atrás en su intención de talar árboles en el histórico eje para sacar adelante su proyecto de remodelación.
Según explicó el consejero, la Ley de Patrimonio Histórico exige que el plan del Eje Prado-Recoletos sea evaluado de manera vinculante por la Dirección General de Patrimonio Histórico para poder ser aprobado, y agregó que el motivo es que el eje fue declarado Bien de Interés Cultural, con categoría de monumento, en 1999 por el propio alcalde, quien en esa fecha era presidente de la Comunidad.
El decreto por el que el Eje Prado-Recoletos fue declarado BIC “protege las fuentes, los monumentos, de forma específica los árboles del Paseo del Prado y el trazado del siglo XVIII”, en palabras del consejero. De esta manera, la Comunidad será la encargada de decidir si el proyecto cumple la legalidad cuando lo reciba.
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