Ni yo, ni nadie

No me extrañaría que la OPA a Endesa acabe interesando a los que elaboran los récords del Guiness por su permanenecia en el tiempo. Ya han pasado 15 meses largos y nuevas causas se abren en los juzgados. Ahora Gas Natural e Iberdrola han recusado a la titular del Juzgado número 3 de lo Mercantil que en su día paralizó la OPA de la gasista catalana por entender que había un pacto de concertación previa con Iberdrola. Dicen los responsables de estas empresas que tienen dudas sobre su independencia e imparcialidad. Parece un poco extraño que ahora, a un día de la vista y casi nueve meses después de su resolución, la juez esté envuelta en sospechas.

Habrá que dejar que actúe, por supuesto, el órgano de los jueces que será el que decida si efectivamente la señora Iglesias debe ser apartada del caso. Lo que desde luego se puede decir al margen de lo que dedica la justicia es que huele a retraso; huele a que los directivos de Gas Natural, en este caso acompañados por los de Iberdrola, se han propuesto que si ellos no pueden hacerse con Endesa -y mira que lo han intenado- no lo pueda hacer ninguna otra empresa. No cabe duda de que la decisión de recusar a la juez alarga el proceso, ya que mientras no se despeje ese camino tampoco puede avanzar la de E.On ni ninguna otra. La pregunta que se hace mucha gente desde hace mucho tiempo es por qué Gas Natural no tira ya la toalla, si no puede pagar a los accionistas lo que ofrece otro. Hace unos días arremetieron contra la compañía alemana.

No les parecía bien que E.On tuviera tanto dinero, circunstancia que dejaba a Gas Natural en inferioridad de condiciones. Esto ya parece un juego de niños, pero malvados. Hay muchas empresas que abandonan proyectos de concentración. La propia E.On lo tuvo que hacer con la británica Scottish Power. Tampoco parece que tenga mucho futuro la de Abertis y Autostrade. No me parece que sea un borrón y más si lo que ocurre es que hay otras empresas interesadas y realizan una oferta más atractiva para los accionistas. Gas Natural ha hecho todo lo que ha podido, debido y más para hacerse con Endesa. Sencillamente, no ha podido ser. Deberían mirar al futuro y no entorpecer más un proyecto que compete decidir a los accionistas de Endesa, ni siquiera a sus directivos.