Los ecuatorianos en una jornada tranquila de elecciones

Los ecuatorianos votaron hoy para elegir a los 130 miembros de la Asamblea Constituyente en una jornada tranquila, salvo algunos incidentes aislados, según observadores nacionales y extranjeros.
La situación fue calificada como "normal" por el jefe de la misión de observación de la Unión Europea (UE), el portugués José Ribeiro e Castro, quien hizo el balance cuando había transcurrido más de la mitad de las diez horas de votaciones.
Ribeiro e Castro indicó a Efe que al comienzo de la jornada electoral, que se abrió a las 07.00 hora local (12.00 GMT), hubo atrasos en algunas juntas receptoras de votos (mesas de votación), pero los problemas se solucionaron pronto.
"El ambiente está tranquilo, la gente está votando", subrayó el delegado europeo.
Poco después de la apertura de los colegios, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, calificó las elecciones como "una contienda electoral justa, la más democrática de la historia" del país, e instó a la población a "desechar el odio e incorporarnos todos y todas al cambio que tanto hemos deseado".
Para Correa, con la Asamblea Constituyente, promovida por él mismo, se buscará "la luz al final del túnel" para conseguir una "patria libre y soberana".
Unos 9,3 millones de ecuatorianos fueron convocados a las urnas para elegir a los integrantes de la Asamblea Constituyente, que redactará una nueva Carta Magna y se instalará diez días después de la proclamación de resultados.
El presidente del Tribunal Supremo Electoral, Jorge Acosta, manifestó a su turno que la Asamblea Constituyente debe llevar a Ecuador "paz, justicia y progreso".
Según José Valencia, director de la organización ecuatoriana Participación Ciudadana, que también actúa como observadora del proceso, con más de 1.200 personas en todo el país, las elecciones han sido "normales", aunque con "algunos incidentes aislados".
Valencia también informó de retrasos en la apertura de algunas mesa de votación y de casos de proselitismo por parte de simpatizantes de candidatos a la Constituyente, pese a que esas acciones están prohibidas desde el pasado jueves.
Según Participación Ciudadana, el problema más significativo fue la suspensión de las votaciones en la localidad de San Francisco, del cantón Muisne, en la provincia costera de Esmeraldas, donde algunos ciudadanos, según informes militares, incendiaron cuatro urnas que contenían un total de 300 papeletas.
"Los mismos miembros de las juntas, de los recintos electorales, incendiaron las papeletas y se produjo la destrucción de todo ese material de sufragio", indicó el director de Operaciones del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Patricio Cárdenas, a Radio Quito.
El director de Participación Ciudadana también mencionó un caso, que aún se investiga en la ciudad costera de Manta, donde se encontraron unas 120 papeletas marcadas con anterioridad.
Pese a esos inconvenientes, las elecciones se desarrollaron "sin complicaciones de peso", añadió Valencia, quien señaló que Participación Ciudadana ofrecerá, después del cierre de los colegios electorales, unas proyecciones de resultados.
Por su parte, el europarlamentario español Carlos Iturgaiz, del Grupo Popular, señaló a Efe que no tenía información de problemas sustanciales en los comicios y, según dijo, "la tónica general es la participación normal de la gente y en total libertad".
Iturgaiz también dijo que en Ecuador vio en esta ocasión "las mayores papeletas del mundo", algunas de 60 x 55 centímetros, como "sábanas", que podrían incidir en el proceso, aunque reconoció que no ha observado mayores dificultades para los electores, que elegirán a sus representantes entre 3.229 candidatos.
Otro eurodiputado español, Emilio Menéndez del Valle, del Grupo Socialista, destacó que los votantes acudieron a las urnas "en familia" en un "acto festivo".
"La gente está con ganas de votar", agregó Menéndez del Valle.