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La banda pretendió continuar negociando pese a su acción asesina

ETA vio como un 'accidente' el atentado de la T-4 que acabó con la tregua

ETA vio como un "accidente" el atentado de la T-4 que acabó con la tregua

> Forma parte de lo que desvela Jesús Eguiguren en su libro 'ETA, las claves de la paz'
> El Gobierno se negó a pensar en un indulto a los presos e incluso presionó con aumentar los procesos

lunes 05 de diciembre de 2011, 09:41h
Es una de las noticias del día, tras una información que ofrece en exclusiva este lunes el diario 'El País': ETA remitió una carta al presidente Zapatero unos días después del atentado que perpetró en la terminal 4 del aeropuerto de Bajaras matando a dos ciudadanos ecuatorianos, el 30 de diciembre de 2006. Según revela el presidente de los socialistas vascos, Jesús Eguiguren, en su libro 'ETA, las claves de la paz', los terroristas indicaron a Zapatero que esas dos muertes fueron "un accidente" y le expresaron su voluntad de seguir negociando. También Arnaldo Otegi, líder de Batasuna, hizo llegar a Zapatero su interés en mediar con ETA para forzar nuevos contactos.
Eguiguren, uno de los representantes del Gobierno en las conversaciones mantenidas con ETA durante el proceso de paz, asegura que tras el atentado de la T-4, la banda y Batasuna insistieron en la necesidad de reanudar el diálogo. "Otegi me dijo que el atentado no significaba la ruptura".

Pese a las iniciales reticencias, el Ejecutivo reanudó los contactos, aunque nunca hubo una negociación real como tal porque, a la exigencia del Ejecutivo de que la banda condenara el atentado y anunciara su final, los terroristas contestaron reclamando un compromiso para garantizar una comunidad única en Euskadi y Navarra.

Tras el atentado de Barajas los representantes del Gobierno y los de ETA se reunieron al menos en otras cuatro ocasiones hasta el 21 de mayo, cuando se produjo la ruptura definitiva del proceso porque las posturas eran ya irreconciliables.

'El País' revela este lunes esa fase de las conversaciones y el informe jurídico que el Ejecutivo manejó sobre las posibilidades de actuación con los presos si la banda terrorista se disolvía. Los expertos consultados -entre ellos el actual ministro de Justicia en funciones, Francisco Caamaño- sostenían que no era posible un indulto que afectara a todos los presos imputados y que serían inevitables nuevos procesos penales.


- Ya lo contamos en Diariocrítico, a través del libro 'El Zapaterato; La negociación, el fin de ETA'>>
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