Griñán pide a Rajoy que convoque urgentemente la Conferencia de Presidentes

Griñán ha querido dejar claro que su Gobierno no va a utilizar jamás la crisis económica para luchar contra el nuevo Gobierno de la Nación ni "como garrote político", al tiempo que ha querido dejar claro que los compromisos asumidos por España en la última cumbre de la Unión Europea son también compromisos de Andalucía.

   José Antonio Griñán ha hecho el anuncio este jueves durante su 'cara a cara' con el presidente del PP-A, Javier Arenas, en la sesión de control al Ejecutivo del Pleno del Parlamento, donde ha querido dejar claro que la Cumbre de la Unión Europea ha supuesto un antes y un después y ha expresado públicamente que Andalucía asume los compromisos que España asumió en la misma.

   No obstante, el presidente ha estimado que en dicha cumbre se han cometido algunos "errores" porque, a su juicio, no es posible fijarse solo en la consolidación fiscal y no mirar la reactivación económica. En cualquier caso, ha querido dejar claro que si lo importante es la consolidación, "vayamos todo a ello porque nuestra lealtad es nítida y sin reservas".

   Asimismo, Griñán ha recordado a Arenas, tras aludir a sus recientes manifestaciones relativas a que los "brotes verdes" empezarán a verse a finales de 2012, que el propio Mariano Rajoy ha expresado que la situación es crítica y que todos los analistas están poniendo de manifiesto que las perspectivas van a empeorar. Ha agregado además que el futuro presidente de España ha indicado que en un primer momento, el control del déficit público no va a producir efectos positivos sobre la economía.

   "No hay recetas mágicas ni parece que las causas desencadenantes del desempleo eran las que ustedes decían", ha dicho Griñán a Arenas y ha valorado que los populares ya vayan reconociendo que las cosas no son como decían y que no basta con un cambio de Gobierno y con la confianza, sino que hay que empezar a asumir compromisos.

   Para el jefe del Ejecutivo andaluz, la propia crisis se ha llevado por delante "la arrogancia" con la que el PP hablaba de la misma sin verla. "Empiezo a escuchar ya un discurso responsable, porque parecen que se han dado cuenta de que no basta con cambiar el Gobierno y con la confianza y que hay problemas que van a exigir sangre, dolor y lagrimas". "Bienvenidos a la crisis, que está determinando los comportamientos de todos los países del mundo occidental", ha dicho a los populares, a quienes ha advertido de que por mucho que recurran a la "excusa de la herencia recibida, tendrán que empezar a tomar medidas".

   Ha querido dejar claro que su Gobierno va a apoyar todas aquellas medidas que favorezcan la creación de empleo, conservar nuestro modelo social y las dirigidas a la consolidación fiscal. Ha manifestado que, a diferencia de lo que encontró José Luis Rodríguez Zapatero en el Congreso de los Diputados, Rajoy tendrá enfrente una oposición útil, mientras que en Andalucía podrá contar con un Gobierno que echará todas las manos que sea necesarias para salir de la crisis.

   José Antonio Griñán también ha aprovechado para poner de manifiesto su queja por el hecho de que Rajoy, una vez que ganó las elecciones generales, convocara a los presidentes de las comunidades del Partido Popular para tratar asuntos "que afectaban a todos". "Lo que afecta a todos se debate con todos", según el presidente, para quien la Conferencia de Presidentes es un foro que permite ver "todo el conjunto y luego podremos hablar de lo particular".
Rajoy lo recibirá

   Por su parte, el presidente del PP-A ha replicado a Griñán que lo extraño sería que no apoyara los compromisos de Zapatero y Rajoy en Bruselas y le ha reprochado que diga "tan tranquilo" que habrá colaboración de su Gobierno con Mariano Rajoy, cuando varios de sus colaboradores y dirigentes del PSOE-A llevan 20 días "criticando" al futuro presidente "desde el primer momento" y "dándole caña desde por la mañana a por la noche".

   Ha expresado que, por supuesto, es una "buena idea" la convocatoria de la Conferencia de Presidentes, a la que Griñán acudirá, según ha expresado, con una "característica especial, ya que será presidente de la Junta-candidato". Ha indicado que, a partir de ahora, todas las propuestas del Gobierno de Griñán las entiende en campaña electoral y ha apuntado que, respetando la potestad del presidente de la Junta, cree que las elecciones autonómicas se celebrarán el 25 de marzo.

   Asimismo, ha garantizado a Griñán que Rajoy lo recibirá una vez que haya sido investido como presidente de España, si bien ha aprovechado para demandar al jefe del Ejecutivo andaluz que reciba a los alcaldes de Andalucía.

   Javier Arenas ha confiado en que los meses que hay por delante antes de las elecciones andaluzas sean aprovechados por todos los partidos para analizar los problemas de esta tierra y hacer propuestas de futuro. Ha criticado que Griñán diga que esta comunidad es la "mejor posicionada" para salir de la crisis económica, cuando hay 1,2 millones de parados y una tasa de paro del 30 por ciento. A su juicio, el cambio de modelo productivo en Andalucía ha consistido en que se han "perdido empleos en todos los sectores productivos".

   Para el dirigente popular, la constante en esta legislatura ha sido la "pérdida de calidad vida" de los andaluces y el "continuismo" como una seña de identidad del Gobierno andaluz. Ha calificado a Griñán como el presidente "menos dialogante" y "menos institucional" de la historia, al tiempo que lo ha acusado de cambiar las "reglas del juego sin consenso", mientras que "no ha gobernado para todos, sino que ha abusado del ordeno y mando".

   A su juicio, los andaluces de hoy "han perdido muchas oportunidades y los del mañana van a heredar muchas deudas". Tras indicar que hemos tenido "cuatro años de malestar", ha señalado que la gran cuestión es que hoy en Andalucía se vive peor que hace cuatro años y después de tres décadas de gobiernos socialistas, tenemos las pensiones más bajas, la mayor tasa de pobreza y ostentamos el récord de paro de la Unión Europea.