¿El Rey renunció a su 'Fortuna' o le presionaron para hacerlo?

Nuet ha registrado una serie de preguntas escritas al Gobierno en el Congreso sobre esta cuestión un día después de que Zarzuela anunciara que el jefe del Estado quiere prescindir del barco, una decisión que la Casa del Rey ha justificado como un gesto para seguir la "lógica de la austeridad" que afecta a todas las administraciones debido a la gravedad de la crisis económica.

Sin embargo, el diputado apunta que fuentes cercanas a Patrimonio Nacional habrían advertido ya de las importantes dificultades para mantener la embarcación apuntando incluso la posibilidad de que tuviera que venderse o llevarse al desguace dado el elevado coste en "reparaciones, amarres, mantenimiento técnico y de sueldo del personal para su uso". "Sólo llenar sus depósitos de combustible cuesta más de 20.000 euros", agrega. Precisamente este motivo fue el que llevó a la  la Familia Real a recortar gastos y anunciar que sólo saldrían a navegar con el 'Fortuna' de forma excepcional -en 2012 el Rey sólo salió una vez el día 13 de agosto aconsejado por los técnicos que recomendaban mover el yate para su mejor conservación-, y en su lugar utilizaban la lancha 'Somni', propiedad del armador Josep Cusi, que éste pone a disposición de don Juan Carlos todos los veranos.  

Por ello, Nuet demanda conocer "cuáles han sido los verdaderos motivos para solicitar la desafectación del yate". Además, dado que no se conoce el destino final del 'Fortuna', si se mantendrá como propiedad pública, si se venderá o, incluso, si puede ser desguazado, el diputado también aspira a que el Ejecutivo le explique si "considera adecuado el Gobierno el mantenimiento por Patrimonio de este tipo de prestaciones".

El Gobierno buscará el uso "más rentable" del yate

Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha garantizado que el Ejecutivo buscará el uso "más eficiente" y "más rentable" del yate 'Fortuna', una vez que el Rey ha renunciando a su utilización exclusiva.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Sáenz de Santamaría ha indicado que fue este jueves cuando el Gobierno conoció la decisión del Rey de renunciar al uso exclusivo del yate 'Fortuna' que le regalaron los empresarios de Baleares y que ahora esa embarcación se tendrá que "desafectar" y salir de los bienes de Patrimonio Nacional al servicio de la Corona para pasar a formar parte de Patrimonio del Estado.  

A partir de ahí, ha añadido, el Gobierno estudiará "los distintos usos que pueden darse" a la embarcación y "en las mejores condiciones". "Estamos en ese proceso y decidiremos el uso mejor, mas eficiente y más rentable", ha asegurado.


Construido por los astilleros de Izar en San Fernando (Cádiz), el yate del que se ahora se desprende tiene una cubierta principal con un salón noble, un comedor, una cocina y un gran puente de mando. En el piso inferior, tiene cuatro camarotes, dos reservados para el Rey y sus invitados, que ocupan toda la manga, y otros dos a ambas bandas del pasio central.
   


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