Los obispos de Salto (Uruguay) y Gualeguaychú (Argentina), Pablo Galimberti y Jorge Lozano, organizaron este jueves una oración justo en el límite indicado en el puente binacional General San Martín, inactivo desde hace semanas por la manifestación que impide el paso del lado Argentino.
Galimberti recordó que el puente “se construyó sobre las ilusiones de intercambios y eso se ve ensombrecido por diferencias, pero esto no nos debe llevar a una Navidad triste”. "Hay muchas voces, muchas familias, están nuestros pueblos. Entonces, que nuestros encuentros, nuestros abrazos, nuestros augurios sean también en nombre de todos aquellos que esperan que estos pasos despejen el camino de un reencuentro más fecundo de nuestros pueblos hermanos", pidió el religioso.
Mientras tanto, la obra Don Pedro, que asiste a unos 300 niños pobres de la periferia de la capital uruguaya, organizó el viaje de varios de ellos hasta la ciudad de Gualeguaychú. La idea: llevar un mensaje de amistad entre ambos países. Sin ninguna referencia a las plantas de celulosa, los niños llegaron incluso hasta la Municipalidad de Gualeguaychú, fueron recibidos por el intendente y escoltados por los activistas que cortan la ruta.