Adelantándose al anunciado receso indefinido del Congreso Nacional, los 100 diputados ecuatorianos aprobaron un receso de 30 días y anunciaron su retorno para los primeros días de enero.
Con 62 votos, el Pleno del Parlamento resolvió iniciar su receso legislativo desde este jueves 29 de noviembre, de conformidad con lo que establece el Art. 132 de la Constitución que determina que “el Congreso Nacional se instalará en Quito, sin necesidad de convocatoria, el 5 de enero del año en que se posesione el Presidente de la República y sesionará en forma ordinaria y permanente, con dos recesos al año, de un mes cada uno”.
Según la resolución, propuesta por el legislador independiente Jimmy Jairala, las comisiones especializadas permanentes continuarán trabajando, obligatoriamente, durante el receso.
Igualmente, el Congreso exigió al resto de poderes constituidos el total respeto a la Carta Magna, al estado de derecho, a las leyes y al orden democrático. La resolución rige inmediatamente, sin perjuicio de su promulgación.
Durante el debate, los parlamentarios aseguraron que permanecerán vigilantes de las decisiones que adopte la Asamblea, porque el único organismo para declarar el receso legislativo es el propio Congreso Nacional, mas no la Constituyente ni ningún otro ente del Estado, pues el pueblo estableció los plenos poderes, pero para dictar una nueva Constitución y, por tanto, debe respetar su estatuto.
Jimmy Jairala, tras aclarar que si bien el Pleno entra en receso, las comisiones legislativas continúan laborando, dijo que estarán pendientes de lo que resuelvan los asambleístas, porque no pueden permitir que se rompa el estado de derecho y el régimen democrático.
Entre tanto, Carlos González (ID) precisó que si la Asamblea declara cualquier acción en contra de esta Función del Estado, las horas de la democracia estarían contadas, porque únicamente en la dictadura desaparecen los Parlamentos, al subrayar que el Congreso, de manera constitucional, se acoge a su receso y, con ello, evitarán que se mancille la majestad del Legislativo con actos bochornosos.
Que sea la Asamblea la que se invente cualquier figura para pretender disolver a este ente parlamentario, pero eso es sinónimo de dictadura y un claro acto de violación a la Carta Política, agregó, al explicar que el receso no significa renunciar a su acción legislativa y fiscalizadora y que el Presidente del Congreso Nacional está facultado para convocar a un período extraordinario en cualquier parte del país.
El Parlamento fundamentó su decisión en lo que establecen los artículos 126 de la Constitución, que señala que “la Función Legislativa será ejercida por el Congreso Nacional…” y que esta Función del Estado ecuatoriano, se encuentra en pleno ejercicio del mandato popular y cumpliendo con sus funciones constitucionales de legislar y fiscalizar; y 132 que hace referencia a los dos recesos al año.
A favor de la resolución votaron 62 legisladores, 3 se pronunciaron en contra y 20 se abstuvieron.