El presidente del comité de gobierno de Unió, Josep Antoni Duran, y el candidato de la formación a la presidencia de la Generalitat, Ramon Espadaler, han avisado de un posible pacto para formar gobierno tras las elecciones del domingo de Junts pel sí, la CUP y Catalunya Sí Que Es Pot (CatSíQueEsPot). Esta posible 'teoría de la conspiración' en corte soberanista quedaría bastante desactivada porque la CUP dijo que no apoyará ningún proceso que no incluya la declaración unilateral de independecia o investir a Artur Mas como president, aunque sí a Raül Romeva. Además, Sí Que Es Pot (la lista donde está incluido Podemos) asegura que no dará sus votos a Mas.
"Los más fácil es que gente de ERC que está en Junts pel sí, gente que es más de ERC, que es más independiente, cabalgará con los de CatSíQueEsPot y la CUP, que harán, como en Barcelona, un gobierno inestable, que no dé confianza", ha afirmado Duran en el mitin de Unió en Lleida.
Espadaler, en la misma línea, ha asegurado que será CatSíQueEsPot quien liderará el Govern: "Alguien gobernará, si Junts pel sí no tiene programa, gobernará CatSíQueEsPot y la CUP". Según ha dicho, "el tripartito será un juego de criaturas con lo que nos viene", y para que eso no ocurra ha pedido el voto para sus propuestas serias, abiertas a hablar con otras fuerzas que parten del diálogo.
"Tendremos que dialogar, sí o sí", ha afirmado Espadaler en el mitin el que Duran ha hecho un llamamiento a quienes se ha referido como la gente de CiU de toda la vida. El candidato por Lleida y exconseller de Agricultura Josep Maria Pelegrí ha coincidido con Espadaler y Duran al mostrar su convicción de un acuerdo entre Junts pel sí y CatSíQueEsPot.
Rabell ofrece una alternativa
Lejos de caer en esa teoría, el candidato de SíQueEsPot a presidir la Generalitat, Lluís Rabell, ha lamentado que ERC apoye al president de la Generalitat, Artur Mas, por lo que les ha retado: "Si queréis votar con dignidad votadme a mí. Yo no os haré marranadas".
Lo ha dicho en un mitin en el distrito barcelonés de Nou Barris ante más de 2.000 personas y con el secretario general y el político de Podemos, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón; la colíder de ICV, Dolors Camats, y la candidata número 7, Jéssica Albiach.
Rabell ha cargado contra la lista de Junts pel sí porque en ella "nadie se atreve a exhibir al que es el auténtico candidato". Ha relatado que al principio no tenían claro quién era el presidenciable hasta que CDC dijo que "estaba clarísimo", en referencia a que el cabeza de lista, Raül Romeva, dijo en agosto que no estaba decidido, y horas después tuvo que reconocer que era Mas, número 4.
Para Rabell es una estrategia para no dar la cara, y ha puesto como ejemplo la actitud evasiva de Romeva en los debates cuando le han preguntado por la gestión de Govern y la presunta corrupción de CDC -incluida en Junts pel sí-: "Nadie es capaz de dar la cara ni defender su política".
Pero en realidad nadie se atreve a hacer quinielas. Mas esperará a hacer números tras conocer los resultados la noche del domingo, y la CUP es su primer objetivo para sumar sus escaños, aunque puede que fueran necesarios alguno más, y ahí es donde sólo encontraría a SíQueEsPot como posibles socios, ya que la formación de izquierdas, a pesar de su dura crítica contra el president, no se niega a convocar un referéndum y que la gente decida sobre la independencia.
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