El colegio Ciudad de Valencia sufre una plaga de roedores

Los ratones aparecieron a comienzo de curso pero el problema fue más acuciante a medida que se acercaban las vacaciones de Navidad, informó personal docente.

El colegio, al que asisten alrededor de 800 niños ubicados en seis pabellones, fue inspeccionado por Sanidad el pasado mes de diciembre lo que llevó a la instalación de cepos y a la clausura de varias áreas del establecimiento.

"Hay nidos de ratones en las aulas", señalaron desde el centro, donde consideraron que la situación es "alarmante".

La primera semana tras el parón de Navidad, varias personas de Sanidad tomaron fotos del centro y los trabajadores desalojaron una de las aulas del pabellón de Infantil y llevaron a los pequeños a una clase más pequeña dejando los muebles y el material didáctico en los pasillos del centro.

"Los niños están en el colegio con los pasillos repletos de muebles y cosas. El otro día casi se cae un mueble", afirmaron trabajadores del centro, que añadieron que "puede pasar cualquier cosa".

Tras el desalojo, Sanidad decidió poner cepos en el aula desalojada y en una clase contigua. Los cepos se colocaban a las 16.30 horas, cuando los niños se iban a casa, y los propios trabajadores eran los que los retiraban a las 8.30 horas. Además, el viernes pasado Sanidad envió varias personas para limpiar el aula de nuevo y se ha cerrado una parte del pabellón de Infantil cercano a la cocina, aún no clausurada, y algunas clases más.

La directora del centro propuso su cierre pero Sanidad le comunicó que no lo hiciera todavía. Además, el pasado martes la dirección del colegio envió una carta a los padres de los alumnos para explicarles la existencia de la plaga y esta semana los progenitores de los niños de 4 y 5 años mantendrán reuniones con los profesores, donde hablarán de la evolución de sus hijos y aprovecharán para informarles del problema de las plagas.

Por su parte, el PSOE afirmó que los padres de los menores temen "posibles infecciones" ante la plaga de roedores, además de los malos olores generados por los animales y por los productos empleados para la desratización.

Los socialistas creen que la continuación de los trabajos de limpieza mientras los niños van a clase es "la gota que colma el vaso" en un distrito con "gran demanda escolar", que tiene que hacer frente al crecimiento del casco histórico de Vallecas, al barrio de Santa Eugenia, parte de la Cañada Real y el desarrollo del Ensanche.